Escuchar te activa
Por: Juliana Henao
Se nos ha dicho siempre que una regla para la comunicación efectiva es la escucha. Sin embargo, en la práctica, acallar hasta los propios pensamientos cuando alguien nos está expresando una idea, posición, o situación, puede resultar bastante difícil, sobre todo si en el camino hemos aprendido a defender nuestras propias versiones del mundo y de la vida, y la experiencia nos ha dado la oportunidad de confirmar esas creencias, que ya se convirtieron en principios y que por su importancia, trascendimos hacia verdades absolutas en nosotros mismos.
El acercamiento hacia una persona, implica siempre la puesta en la mesa de lo que crees y lo que sabes, que está mediado por tu experiencia, es darse la oportunidad de explorar otras verdades que no son las nuestras y pasar el lumbral de la aceptación, para comprender la diferencia que existe en el otro y por lo tanto, el mensaje que trae a nuestra vida, desde su propia verdad.
La premisa para iniciar el ejercicio de escuchar activamente, es comprender que esta vida no es una escuela. No vinimos a aprender, vinimos a recordar. La escuela es un lugar adonde uno va si hay algo que uno no sabe y quiere saber. No es un lugar adonde uno va si ya sabe algo y simplemente quiere experimentar su sabiduría. La vida es una oportunidad para saber experimentalmente lo que ya sabemos conceptualmente y obrar en consecuencia.
Lo complejo de este recordar o re-acordar, es que ya poseemos un sistema de creencias que aprendimos a pilotear en modo automático.
Para cada estímulo, siempre hay una reacción que está determinada por aquello que nos enseñaron a creer y por ello, es nuestra verdad incorporada para el mundo.
Pero y si lo que hacemos es re-acordar, basándonos no solamente en lo aprendido, sino en el sentir de lo que nuestro cuerpo y nuestra mente nos dice.
Es decir, ¡si antes de decir algo somos capaces de ponerlo en la mente y luego en el corazón, para escuchar sus puntos de vista y luego proceder entonces a emitir un mensaje!
Dispongamos la atención para que podamos viajar en la palabra de los compañeros y recordemos lo que si somos, a través de los otros.
* Fragmento del Kata-ller: Escuchar –Te Activa, del programa Encauzando Tu Propia Vida Autor: Juliana Henao (derechos de autor) en exclusiva para El Nuevo Georgia.