El arte de aceptar elogios, regalos y ayuda
Por: Juliana Henao
Parece insólito, pero existen muchas personas a las cuales les cuesta recibir. No aceptan elogios, regalos o reconocimientos por sus logros de parte de otras personas. Y mucho menos ayuda.
Esto puede suceder por varias razones, algunas de ellas tiene que ver con la creencia popular de que reconocerse así mismo como alguien grandioso es sinónimo de arrogancia y falta de humildad. Y en la mayoría de los casos a los arrogantes nadie los quiere. Entonces se opta por no aceptar recibir, pero esta humildad es falsa, porque quien es humilde de corazón sabe reconocer el valor del recibir y las maravillas que la vida tiene para darle.
Otra posibilidad es la falta de amor a sí mismo, que lleva a descalificar cualquier logro o a no considerarlo lo suficientemente valioso como para ser reconocidos y muchos menos por otros.
Esta falta de amor se suma a un sentimiento de desvalorización que solo puede ser superado cuando se entienda que todo parte de aprender a amarse a sí mismo. De reconocer la inmensidad de Dios al crear al ser humano y dotarlo de tantos talentos y habilidades. Y de ser merecedores de las grandezas del universo.
Otro de los factores es la arrogancia, el creerse tan autosuficiente que aceptar supone debilidad. El aprender a recibir implica reconocer la propia vulnerabilidad y la alegría de compartir. No existe ningún ser humano que en un momento dado no necesite la ayuda de otro. Ya sea en casos simples como abrir un frasco de mermelada o el sentimiento de sentirse verdaderamente amado.
La creencia de que siempre hay una intención negativa de parte quien da. Y entonces como medio de protección y defensa no se acepta, porque hay la posibilidad de que más tarde el otro se aproveche, vaya a pedir un favor más grande, o se va a estar en deuda por el resto de la vida. La realidad puede ser bien diferente, hay personas que gustan de dar y compartir sin ningún interés. Otros manifiestan la gratitud con regalos.
Algunas prácticas que pueden facilitar el arte del recibir son:
Decir si a las pequeñas muestras de agradecimiento de parte de otros, como cuando si el trabajador del supermercado se ofrece a llevar las bolsas hasta el carro o el taxi. O aceptar la invitación a comer de parte de un amigo.
Si se está en una situación difícil aceptar la ayuda monetaria de amigos y parientes.
Dar las gracias en todo momento.