Felices fiestas, ¡Felices ventas!
Por: MARIA EMILIA SALAZAR, especial para el Nuevo Georgia.
Hoy quiero brindarles un fuerte abrazo de agradecimiento por seguir nuestra columna con gran interés durante todo este año, gracias a ustedes seguimos creciendo juntos.
Ya se acerca la época de mayor actividad del año para el sector del comercio, las fiestas Navideñas, por ello se le recomienda planear estrategias y actividades que permitan mejorar e incrementar las ventas, una adecuada preparación para la temporada será la clave.
Diciembre es el mejor momento para las ventas y para manifestar el agradecimiento, se puede hacer a través de un regalo ya que es un elemento social de gran importancia durante todo el año, pero en especial en esta época adquiere una importancia especial tanto en lo personal como en el campo empresarial.
Regalar es una actividad intensa, creativa y hasta divertida para la persona que elige el regalo como para la persona que lo recibe, el regalo debe ser el adecuado para cada ocasión. Pero a la hora de regalar hay que acertar y no dar un “patinazo” con el regalo, pues la finalidad del mismo se puede volver en nuestra contra. Y el efecto positivo que deseábamos se puede convertir en algo negativo o en una actitud poco cordial.
Hay que tener en cuenta que el regalo suele perdurar en el tiempo, que genera un buen recuerdo, y un buen recuerdo da a la persona una mejor predisposición hacia nosotros o nuestra empresa, debe combinar unas cuantas características básicas, un precio razonable, buen gusto, acorde a la persona o entidad destinataria del mismo y un cuidado envoltorio.
El exterior de un regalo, puede decir mucho del contenido del mismo y de la persona o entidad que lo remite. El cuidado del aspecto exterior es de vital importancia, porque dice mucho de quien lo regala y de lo que se regala. Denota un cierto interés por el acto de regalar y no una mera obligación de regalar. Añadir valor al regalo es añadirle un buen envoltorio.
Hasta el color del papel puede tener un significado: el amarillo es el color de la luz, la creatividad y el ingenio; el azul, es el de las personas tranquilas, relajadas y que transmiten paz y serenidad; el naranja denota alegría, vitalidad y energía; el rojo, es siempre signo de la pasión, la fuerza y la fuerte personalidad; el verde es el color de la naturaleza, de la esperanza y de la frescura.
Si tenemos una intensa vida social, al igual que se hace con el fichero de comidas, se puede tener un pequeño fichero con los regalos que hacemos, a quien se lo hacemos y el motivo por el cual se hace. Esto nos ayudará a no repetir y ver la evolución de los mismos con el tiempo.
Los regalos se abren en el momento de la entrega, lo que denota interés y es una forma de agradecimiento inmediata. Hay países que no tienen esta costumbre, pero en la cultura occidental dejar un regalo sin abrir denotaría una falta de interés e incluso, podría “sentar mal” a las personas que lo regalan.
Si la persona que lo regala no está presente (se ha enviado el regalo por otro medio) se puede agradecer por carta (formal) o si tenemos confianza por teléfono (informal).
Regalar, es un arte y como tal hay que practicarlo, perfeccionarlo y, si cabe, mejorarlo a base de consejos, debemos fiarnos de los profesionales para ello.
Gente TPS les desea
“Feliz thanksgiving en Familia”
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