Bienvenido el 2012
Cada día trae su propio afán, así mismo cada año y cada período de nuestras vidas, 2012 no va a ser la excepción máxime si consideramos que varios eventos se juntan para hacer de éste uno muy especial, por ejemplo, las elecciones presidenciales en las que se definirá si es reelegido el demócrata Barack Obama a quienes muchos ya no quieren o se elige a un republicano de quienes muchos sienten hasta miedo.
Para elegir no es que están muy variadas las opciones, la historia de aquellas elecciones en Perú donde el común de la gente debió decidirse entre en “ladrón” y un “criminal”, o de las recientes en Nicaragua en iguales circunstancias no es que estén lejos de ser las de aquí, claro que aquí el panorama cambia.
Sin embargo no solo en materia electoral habrá de qué hablar. Con ello vienen cientos de miles de intereses que afectan a cientos de millones de personas que a la postre, tendrán que esperar que pasen las primeras, para, dependiendo el resultado de las mismas, se pueda saber si hay voluntad de hacer lo que el pueblo espera.
Control y atención a los temas financieros; menos demagogia y engaños en el sector hipotecario, análisis de una reforma migratoria y el gran compromiso de quien resulte electo, que sin duda es el tema del empleo. Estos no son aspectos fáciles, no son sencillos, no son de ahora ni se van a resolver de un solo tajo.
Así las cosas, si empezamos desde ahora a mirar que las elecciones apenas son en noviembre y que ese es el mes onceavo, sin haber empezado sabremos ya que de todos los temas anteriores, el único que se llevará a feliz término es el mismo en sí de las elecciones, los otros tendrán que esperar al 2013.
Ahora bien, la rueda no es que se vaya a detener, es que de acuerdo a los analistas caminará más lento y con más piedras en el camino. Esas piedras se llaman políticos y esos políticos tienen un apellido: Republicanos, a fin de cuentas ellos no perderán nada, el pueblo lo perderá todo.
Pero pongámosle un poco de entusiasmo al nuevo año porque no todo puede ser malo, por ejemplo, según los que han tergiversado los conocimientos de Los Mayas, el mundo se acabaría el 12 de diciembre de 2012. Eso puede ser una gran noticia, depende del cristal con que se mire, pero de todas formas, ni así dicen los escritos antiguos de los indígenas ni eso sucederá como lo auguran.
Por otra parte, las organizaciones que defienden los derechos civiles y humanos de los inmigrantes, tuvieron un buen período de adiestramiento en el 2011 atajando leyes, luchando porque el impero del fascismo que los republicanos han querido entronizar en el país no haga más daño al país y a su gente y con ese entrenamiento tendrán que demostrar en el 2012 que han quedado listas para seguir la batalla.
Por resolver quedaron muchas leyes anti-inmigrantes como las de Georgia y Alabama, pero no es secreto para nadie que vendrán otros Estados a unirse a esta bochornosa lista, para las que organizaciones como la Alianza Latina de Georgia por los Derechos Humanos—GLAHR, o la Asociación de Funcionarios Latinos Electos de Georgia—GALEO, ya vienen cargando sus baterías.
De todos modos es un nuevo año, es un nuevo comienzo, es un nuevo período, es un nuevo camino, es un nuevo motivo para empezar nuevos proyectos en medio de lo que parece no augurar cosas mejores. Feliz año 2012!