¡Por qué dar gracias!
“Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque ésta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”.
(1 Tesalonicenses 5:16-18)
Dar gracias a Dios en todo y por todo no debería ser un ejercicio simplista sino un hábito que nos acompañe siempre, aunque hay momentos en los cuales no entendamos por qué estar agradecidos con situaciones o momentos que no nos son favorables, quienes tenemos una esperanza más allá de nuestras propias fuerzas, sabemos que es el principio del gozo, y un corazón agradecido, siempre estará lleno de otras virtudes.
A través de todos estos años hemos escrito este editorial con el alma, con el corazón, con las entrañas porque el camino recorrido no es fácil y la tierra por la que andamos tiene también sus valles de lágrimas, pero antes que eso, entendemos que todas las cosas nos deben ayudar para bien; para crecer, para seguir luchado, para no detenerse.
Por eso, antes que comenzar a enumerar cada pilar de nuestro sustento, declaramos que nuestro sustento ha sido Dios, quien nunca nos ha abandonado, y no porque seamos los más buenos, sino porque siempre le hemos reconocido su papel en nuestras vidas, nuestros negocios y nuestra carrera.
Es obvio, que, como medio de comunicación comunitario que solo se debe a su comunidad, estamos más que agradecidos con nuestros clientes que son nuestra médula económica y a ellos nuestro eterno agradecimiento, son muchos los que han hecho de este proyecto una realidad y a ellos un infinito reconocimiento, desde quienes tienen con nosotros casi los 20 años, hasta los que acaban de entrar a poner su pauta en un anuncio clasificado.
A nuestros lectores, gracias por su fidelidad, no son menos como muchos creen, son los que todavía creen en la seriedad de una comunicación que no se hace por otra cosa que la de servir a los más sanos y nobles intereses de nuestra familia latina.
A la comunidad en general, gracias por su aceptación y por ser de todas las maneras, nuestra razón de estar aquí y seguir todos los días, intentando servirles como se lo merecen, respetuosa y decentemente.
A todos nuestros colaboradores, Juliana, María Emilia, Angélica, Juan Carlos, Jesús, Lucy, María Alejandra, Max, Antonio de los Santos, Germán y tantos otros, nuestro eterno agradecimiento.
¡A nuestras familias por su apoyo incondicional y a todas las personas, instituciones y organizaciones con las que este año hemos interactuado, nuestros más sinceros agradecimientos!