Vecinos culpan a administración de apartamentos por explosión

Por: Rafael Navarro- ENG

Con serias heridas en distintas partes de su cuerpo que lo mantienen—al cierre de esta edición—en una unidad de cuidados especiales para quemados, del hospital Wellstar de Austell en el condado de Cobb, resultó el dreamer y activista de los estudiantes latinos indocumentados Eduardo Samaniego.

A eso de las 10:15 de la mañana los bomberos de Cobb recibieron una llamada sobre una gran explosión registrada en el número 500 de la Willams Street en Marietta en los apartamentos Crestmont, lo que ocasionó que parte del complejo se quedara sin fluido eléctrico. “Al menos 10 apartamentos fueron destruidos”, según los bomberos.

“Eduardo tiene graves quemaduras, se le fracturaron varios huesos y algunas costillas y debió haber sido llevado en helicóptero”, dijo María, la madre de Giovanny Javier, el encargado del apartamento donde Samaniego se estaba quedando por estos días, luego de aceptar una invitación que le hiciera el partido demócrata de Whitfiel para que hablara este pasado sábado.

Aunque hasta el momento ha tenido que ser sometido a varias cirugías, especialmente en sus brazos debido a las fracturas, los médicos que lo atienen en el Barret Surgery Center del hospital WellStar de Cobb, han dicho que se recuperará pronto dado que no tiene ni órganos ni miembros seriamente comprometidos.

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Lamento y solidaridad

Un vecino de origen afroamericano que dijo, haber ayudado con las primeras labores de rescate de Samaniego, dijo que se sentía muy frustrado porque la tragedia pudo haberse evitado, y expresó que solo la noche anterior habían sentido un fuerte olor a gas, pero los responsables de los apartamentos no les prestaron atención.

Por su parte María del Carmen, otra vecina de donde ocurrieron los hechos, dijo que ella había visto como sacaron a los heridos, y que todos en la comunidad tenían mucho que contar con relación al mantenimiento del lugar.

“Dicen que fue el calentador el que explotó, pero muchos de nosotros reportamos a la administración lo que está funcionando mal y nadie hace nada”, dijo la mujer, quien lleva dos años residiendo en los apartamentos.

Adolfo Mejía, un residente de siete años en el mismo lugar, también dijo que era muy difícil que los administradores les prestaran atención a sus quejas.
“Esto hubiera podido evitarse, si de verdad fue el gas o el calentador el que explotó”, dijo Mejía.

El Nuevo Georgia, buscó la reacción de la administración de los apartamentos Crestmont, pero un funcionario dijo que ellos no daban ninguna información hasta tanto la corporación dueña no se pronunciara.

Por su parte tanto la policía como los bomberos del condado de Cobb han advertido que siguen adelante con las investigaciones para dar con el origen de la explosión y posterior incendio, pero al cierre de esta edición no había un argumento concluyente.