Condena ejemplar a padre que dejó ahogar a su hijo en Marietta
El 18 de junio de 2014, la comunidad en general se sacudió al saber que un hombre de 33 años del condado de Cobb, identificado como Justin Ross Harris, llamó al sistema de emergencia luego de tratar en vano de reanimar a su hijo Cooper Harris de 22 meses, tras haber permanecido más de 7 horas dentro del carro en un día que fue especialmente caluroso.
Las voces de solidaridad no se hicieron esperar, ante la tragedia narrada por Ross Harris, quien dijo desde el inicio que debía haber llevado a su pequeño a la guardería, antes de entrar a su trabajo, pero que en el tramo entre su casa y el lugar había olvidado por completo bajar a su hijo que iba restringido en el asiento trasero del vehículo de espaldas al conductor.
La policía del condado de Cobb quien atendió la emergencia dijo después a los medios de comunicación que trabajaban sobre sólidas evidencias que hacían parecer al caso como un asesinato y no un accidente, y expusieron algunos episodios que finalmente dieron para soportar dicha la teoría.
Una de esas teorías, tuvo que ver con que Ross Harris se había detenido antes de llegar a su lugar de trabajo a desayunar en un Chick Fil A, y que, algunos testigos dijeron haberlo visto subiendo al menor a su carro, la distancia entre el restaurante y su lugar de trabajo está a unos tres minutos e distancia.
Otra sospecha es que, Ross Harris había salido en las horas del medio día a su carro a revisar “algo” pero tampoco se dio cuenta de que el menor seguía en el asiento trasero.
Y la tercera sospecha es que, el padre durante sus horas de trabajo en las oficinas de Home Depot, había estado buscando en su computadora, cuánto era el tiempo que tomaba un niño en morirse dentro de un carro caliente.
Adicional a ello, los policías que atendieron la emergencia dicen que no se explican, cómo Harris no se dio cuenta tampoco de que su hijo estaba dentro del carro en las horas de la tarde, a pesar del olor intenso que manaba del interior del vehículo, y aun así, manejó varias millas para detenerse en otro estacionamiento donde aparentemente descubrió al menor ya muerto.
Un juez acusó a Ross Harris de asesinato y crueldad infantil – cargos que indican al menos que él fue criminalmente negligente en sus acciones antes de la muerte del pequeño Cooper Harris.
Condenado a vida en prisión
Tras un juicio de cinco semanas, una jueza del condado de Cobb deliberó que Justin Ross Harris enfrentará cadena perpetua más otros 32 años de condena por el asesinato de su hijo de 22 meses de edad así como por otros ocho cargos, según nuestro socio editorial Univisión 34 Atlanta.
Durante el juicio, la fiscalía argumentó que Harris encerró intencionalmente a su hijo en el auto. Sin embargo, los abogados alegaron que la muerte del bebé había sido sólo un trágico accidente, provocado por un lapso de pérdida de la memoria de su cliente, por lo que buscarán presentar una moción para un nuevo juicio.
Los otros cargos imputados a Harris se refieren a los intercambios sexualmente explícitos que el hombre mantuvo en línea con seis mujeres, entre ellas una menor de edad, el mismo día de la muerte de Cooper.
Sin embargo, la familia y la ex esposa de Justin Harris mencionaron que era “un padre muy involucrado que amaba a su hijo”, por lo que la única explicación es que la muerte de Cooper haya sido un accidente.