Primera redadas de Trump se llevaron a cientos

La centroamericana residente en Norcross Dicxiana Menjibar, dice que a su cuñado lo arrestaron en su apartamento por tratar de ser respetuoso y colaborar con los oficiales de inmigración que llegaron hasta donde él residía junto a su familia.

“Él les pregunto qué pasaba, y ellos le dijeron que si no abría le iban a tumbar la puerta”, dijo la mujer a nuestro socio editorial el noticiero de Univisión 34 Atlanta.
“Entonces él, por respeto a los apartamentos, les abrió la puerta. Tras que abrieron la puerta le enseñaron la foto del hijo, porque ellos en realidad a quien buscaban era al hijo de él”, narró la mujer.

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Se refiere a uno de los 87 inmigrantes arrestados entre el lunes y el viernes de la semana del 6 al 10 de febrero en el estado de Georgia, la mayoría de ellos en el área de Metro Atlanta, y quienes hicieron parte de la primera redada masiva llevada a cabo bajo la administración del presidente Donald Trump.

Menjibar, dice que desde la detención de su cuñado vive con mucho temor y está al pendiente de sus alrededores cuando sale.

“Da pesar con una persona que no ha tenido ningún problema que se lo lleven así, porque realmente inmigración lo que hace es sacarlos como delincuentes de los apartamentos, casas o de donde sea, no debieran de ser así”, se quejó.

190 arrestados por la regional de Atlanta

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Luego de haber causado revuelo entre las comunidades de distintas regiones del país, el Secretario de Seguridad Interior John Kelly, confirmó que 680 inmigrantes, según él, el 75% con antecedentes criminales, habían sido arrestados con distintos operativos puntuales en Los Angeles, Atlanta, Chicago, San Antonio y New York.

“Casi 200 extranjeros fueron detenidos la semana pasada en los estados de Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur durante una operación de represión dirigida por las Operaciones de Aplicación y Remoción de Inmigración y Aduanas (ERO), contra inmigrantes ilegales y criminales”, dijeron las autoridades en un comunicado.

“De los 190 extranjeros ilegalmente presentes en Estados Unidos arrestados por ERO en Atlanta, 127 tenían condenas penales anteriores además de su estatus de inmigración ilegal”, agregaron.
Otros 29 habían sido deportados previamente de los Estados Unidos y, posteriormente, reingresados ilegalmente.

Además, 17 fueron fugitivos de inmigración con órdenes definitivas de remoción emitidas por un juez federal de inmigración.

De los 190 extranjeros ilegalmente presentes en total; 87 fueron detenidos en Georgia, 84 en Carolina del Norte y 19 en Carolina del Sur.

Las detenciones incluyeron a un ciudadano mexicano arrestado en Georgia que era buscado en su país de origen por cargos de homicidio e intento de homicidio.

Un ciudadano mexicano arrestado en la zona de Charlotte, N.C., previamente estaba condenado por tres cargos relacionados con actos indecentes con un niño. El sujeto también fue previamente deportado a México y posteriormente ingresó ilegalmente a Estados Unidos.

Además, un ciudadano mexicano arrestado en el área metropolitana de Atlanta que se había declarado culpable de cargos de distribución de cocaína.

Operativos de rutina

“Esta operación se llevó a cabo de acuerdo con las operaciones de rutina diarias, dirigidas por los equipos de operaciones contra fugitivas, para detener a extranjeros criminales y otras personas que están violando las leyes de inmigración de nuestra nación”, dijeron los voceros del Departamento de Seguridad Nacional.

Dijeron que los oficiales de deportación de ICE realizan operaciones de represión específicas cada día en lugares alrededor del país como parte de los esfuerzos en curso de la agencia para proteger a la nación, mantener la seguridad pública y proteger la integridad de nuestras leyes de inmigración y controles fronterizos.

“ICE no lleva a cabo barridos, puestos de control u operativos que ataquen a los extranjeros indiscriminadamente”, puntualizaron.
Cundió el pánico

Latrice Latin, una abogada de inmigración, dijo que ellos habían recibido varias llamadas de personas a las que les habrían arrestado a algunos de sus miembros, pero lo que más le llamó la atención fue una de una escuela de DeKalb donde le dejaban saber del arresto de algunos padres de familia.

“Nosotros hemos recibido información de personas que están siendo arrestadas en diferentes condados, yo soy parte de un grupo de personas que responden cuando hay redadas en los apartamentos, nosotros vamos ahí y les ayudamos en sus problemas”, dijo Latin, mientras confirmaba el arresto de dos padres de familia de los apartamentos North East Plaza en la ciudad de Brookhaven.

Luego se dirigió a los apartamentos Parke Twone Norte en Atlanta, donde no encontró respuesta de la comunidad porque todos estaban encerrados y temerosos.
“Ahora mismo no hay una lista de prioridad, algunas personas que no tienen record criminal de pronto no tendrían problema, pero si alguien tiene un record criminal, así sea un ticket por velocidad, ellos te podrían poner en la lista de prioridades para detenerte”, dijo la abogada.

Debye Aracena, una paralegal que estuvo pendiente de los arrestos en Atlanta, con los cambios que se hicieron con las órdenes ejecutivas del presidente Trump hay muchas cosas que cambiaron.
“Antes había algo que se llamaban prioridades. Personas que tenían felonías eran básicamente prioridad para ser deportados. Con las nuevas órdenes ejecutivas del presidente Trump, ya eso no existe, cualquier persona que no está documentada aquí, o presente ilegalmente en el país, es prioridad para ser deportado, no importando si tiene record criminal o no”, advirtió.

Aracena dijo que en los últimos días, ellos habían recibido muchas llamadas de que, ICE estaba tocando puertas en los apartamentos… “están yendo a las fábricas, a los lugares de trabajo para hacer redadas”, denunció.

Según las autoridades, algunas de las personas arrestadas durante la operación de la semana pasada, enfrentarán enjuiciamientos criminales por parte de la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos por entrada ilegal y reingreso ilegal después de la deportación.

Aquellos que no sean procesados penalmente serán procesados administrativamente para ser expulsados de los Estados Unidos. Aquellos que tienen órdenes pendientes de deportación, o que regresaron a los Estados Unidos ilegalmente después de ser deportados, están sujetos a la expulsión del país.