Trump visita Medio Oriente como parte de su primera gira internacional
El Mandatario Donald Trump eligió visitar los países de Arabia Saudita, Israel, Bélgica, Italia y el Vaticano como parte de su primera gira internacional como Presidente de Los Estados Unidos.
Parte importante de su agenda son los encuentros con el Primer Minstro de Israel Benjamín Netanyahu, el Presidente Palestino Mahmoud Abbas, ambos protagonistas del conflicto israelí-palestino en Medio Oriente, la reunión con el Papa Francisco en el Vaticano y finalmente con los líderes de la OTAN en Bruselas y del Grupo-7 en Sicilia.
La visita a dichos países ha marcado una gran diferencia respecto a las giras internacionales previas de ex presidentes estadounidenses, quienes en su mayoría hicieron una visita a sus vecinos más inmediatos como México y Canadá.
En Arabia Saudita, Trump fue recibido cálidamente por el gobierno del rey saudí Salman bin Abdulaziz, con quien firmó un contrato para la venta de armamento y equipo militar por la suma de 110 mil millones de dólares, el cual estará destinado a apoyar la seguridad de este país contra Irán y grupos terroristas.
De acuerdo con el gobierno de Washington, este convenio forma parte de una estrategia de cooperación entre los Estados Unidos, Arabia Saudí y países del Golfo Pérsico. Tal acuerdo incluye mejoras en áreas de comunicación y ciberseguridad, en temas de seguridad costera, fuerzas aéreas y marítimas y misiles.
También se incluye la construcción de 150 helicópteros Hawk en territorio árabe, lo que dará oportunidad a la creación de trabajos que beneficiarán a ambas naciones. Trump recibió la medalla de Abdulaziz Al Saud, el honor civil más alto de la nación, como un gesto de apreciación del rey saudí por los esfuerzos del Mandatario estadounidense por difundir la paz y la estabilidad en el mundo.
En Israel, Trump también fue recibido notoriamente por Netanyahu y el Presidente Reuven Rivlin, a quienes exhortó a llegar a un acuerdo de paz con Palestina, aunque no definió su postura respecto a los términos de dicha negociación si bien su deseo de reanudar las negociaciones de paz que se paralizaron hace 3 años fue muy claro.
Asimismo, reafirmó que Irán no tendrá nunca armas nucleares. Por su parte, el Presidente de Irán Hassan Rouhani, quien fue reelegido la semana pasada para un segundo término de gobierno, señaló que su nación no necesita del permiso estadounidense para crear armamento y que en todo caso, dicho armamento está únicamente destinado a la defensa nacional de Irán.
Al respecto, analistas especialistas en el tema advirtieron que si bien es evidente la intención de Trump de crear una alianza entre Arabia Saudita, Israel y Estados Unidos contra Irán, Irán no parece sentirse amenazado por Trump y su nueva política internacional. En recientes declaraciones, Rouhani calificó la venta de armamento estadounidense a Arabia Saudita sólo como un contrato económico que drena monetariamente a los sauditas pero no afecta en nada la situación existente en la región.
La gira internacional presidencial ha generado críticas contra Trump, particularmente su visita a Arabia Saudí, sobre todo por parte grupos pro-derechos humanos quienes cuestionaron la ausencia del tema de violaciones a los derechos humanos en ese país en la agenda presidencial. Estas censuras se suman al criticismo en los Estados Unidos, generado por el despido inesperado de James Comey, director del FBI, quien seguía la investigación contra el equipo de campaña de Trump por sus supuestas conexiones con el Kremlin.