¿Eres tú de los que nunca tienen tiempo?
Por: MARIA EMILIA SALAZAR, especial para El Nuevo Georgia.
Una de las excusas más comunes de quienes no consiguen lo que desean, seguramente la más frecuente, es aquella de “No tengo tiempo”. Es un recurso fácil tan arraigado y generalizado que casi nadie lo pone en entredicho. Más bien, recibes aprobación y no faltará aquel que sienta lástima por ti: “Pobrecito, nunca tiene tiempo”, dirá. Aun así, no deja de ser una excusa más.
Tengo que decir, sin embargo, que no es fácil combatirla. El mundo moderno nos envuelve en una rutina frenética que nos lleva a toda velocidad, ¿a dónde? Nos enseñan a estar ocupados en lo que sea, siempre y cuando sea todo el tiempo. Aunque sea algo dañino, algo tóxico, algo improductivo, lo importante es que lo hagamos todo el tiempo. Así, conseguimos la ansiada aprobación de otros.
Entonces, no cuidas tu salud porque no tienes tiempo para comer bien o para practicar ejercicio, pero después quieres que los médicos hagan milagros cuando el cuerpo te pasa factura. También te pierdes el irrepetible y maravilloso proceso crecimiento de tus hijos porque no tienes tiempo, porque estas ocupado todo el día en el trabajo y cuando llegas a casa solo deseas descansar.
En el trabajo, no tienes tiempo para lo importante porque te dedicas a gestionar lo urgente, que casi siempre es producto de la histeria colectiva en que se nos convirtió la vida. Sueñas con ser el propietario de un negocio, pero no tienes tiempo para hacer la investigación de mercado o crear el modelo de negocio, ni para testear tu producto, y se te pasa la vida y nunca cumples ese sueño.
Por eso, me causa tristeza cuando escucho, todos los días, a personas valiosas que tienen ideas geniales y maravillosas, pero no tienen tiempo para cristalizarlos, para disfrutarlos. Están ocupadas en un trabajo que odian y que las mantiene estancadas; están atadas a un pasado que no se atreven a soltar porque no tienen tiempo para sí mismas, para crecer en todo sentido.
Entonces, dormimos diez horas, queremos que nuestra mamá o nuestra pareja nos prepara el desayuno y, para rematar, programamos un día muy ocupado: no nos podemos la serie de moda, porque ¿de qué hablamos con los amigos?), revisamos permanentemente el estado de las redes sociales y nos aseguramos de publicar varios reels o stories al día.
No soy nadie para juzgar a otros, pero sí puedo decirte cuáles son los hábitos y las acciones que pueden convertirte en referente del mercado, en el mentor de muchos emprendedores exitosos, y mantenerte en la cima durante mucho tiempo. Duerme el tiempo justo, no veas televisión, silencia las notificaciones del celular y no vivas pendiente de las redes sociales.
Y, sí, estas ocupad@ trabajando mucho tiempo, aprende a poner límites, a tomar recesos en los que tu cuerpo y tu mente se toman un respiro. Y dedica tiempo para compartir con tu familia. Y, por supuesto, haga otras actividades comunes como ir al supermercado o salir a una comida familiar.
Cuando cambies tus hábitos, cuando dejes de involucrarte en esa rutina histérica y frenética, cuando te pongas como la prioridad de tu vida y te organices, cuando tomes el control de tu vida, verás cuán largos son los días. Y, lo mejor, verás cuántas actividades productivas o recreativas puedes realizar en esas 24 horas, en esos 1.440 minutos, en esos 86.400 segundos. Y te parecerán una eternidad…
Comentarios, sugerencias e información:
María E. Salazar: 770-695-1325/678-431-9901
mariae164@gmail.com / salazar95.evc@gmail.com