No hay trabajadores para las polleras
Mientras la demanda de pollo crece, las plantas avícolas se quejan de la falta de empleados.
La situación es inquietante si se tiene en cuenta que Georgia es el principal productor de aves de corral en los Estados Unidos y ha venido sufriendo los embates, primero de la crisis generada por la pandemia y ahora la falta de personal para atender la creciente demanda de pollo.
Se cita el ejemplo de Wayne Farms en Pendergrass, Georgia, el cual abrió 200 plazas para su línea de producción, pero solo 5 personas se dignaron solicitar empleo. De manera similar sucede en otras de sus áreas de operaciones, lo cual muestra una idea del panorama laboral.
Por su parte, a Fieldale Farms, le faltan mil trabajadores para llenar todas sus vacantes. Normalmente un lleno completo de sus líneas de trabajo representaría 4 mil 700 empleados, pero en la actualidad solo laboran 3 mil 700.
Mal generalizado
El presidente de la Federación Avícola de Georgia, Mike Giles, en comentarios al Gainesville Times, dijo que la actividad avícola no ha sido ajena a la falta de trabajadores como ha pasado con otras empresas del estado.
“Yo diría que cada empresa avícola que conozco en el estado tiene poco personal”, anotó Giles pero también reconoció que la contratación ha sido siempre un desafío lo cual se agravó con el asunto de la pandemia.
Las condiciones no favorables de un empleo que exige resistencia física y con bajos sueldos llevaron a muchos a preferir los beneficios de desempleo que fueron patrocinados por el gobierno para afrontar los retos de la pandemia.
No es un trabajo atractivo
Durante años diversas organizaciones defensoras de los derechos de los trabajadores han elevado su voz para que las compañías de alimentos mejoren las condiciones laborales y de seguridad con que trabajan sus operarios.
En los últimos meses esa lucha se ha incrementado, luego de la tragedia sucedida en Gainesville, donde murieron seis personas, cinco de las cuales eran hispanas, al ser víctimas de una fuga de nitrógeno en la planta de Foundation Food Group.
El Nuevo Georgia a través de sus redes sociales sondeó el parecer de los latinos que conocen esta industria y que representan gran parte de su fuerza laboral respecto a la escasez de trabajadores y los resultados demuestran que procesar el pollo no es un trabajo fácil y no bien remunerado.