Espéculo
Es un vocablo que tiene diferentes usos, compuesto de las palabras provenientes del latín, specio que significa mirar, y culum, que se traduce instrumento, de ahí que su significado es “instrumento de mirar”.
El primero, y más conocido uso de espéculo está relacionado a un instrumento médico utilizado en ginecología. El segundo tiene que ver con la ornitología y se distingue con esa palabra a un área en las alas de algunos pájaros que brilla distintivamente.
El tercero ha caído en completo desuso, al grado de que ni la Real Academia Española de la Lengua lo lista a pesar de que es su significado original por el hecho de que tenemos una palabra alternativa y de uso más común para designar el mismo instrumento; nos referimos a la palabra espejo.
Hay evidencia de que los primeros espejos fueron hechos de piedra obsidiana pulida, más tarde en la historia aparecen en el noroeste de África y el medio Oriente los espejos de cobre pulido, después fueron hechos de bronce por las gentes de Asia, y ya en el siglo primero aparece la primera referencia a espejos de vidrio de boca del historiador Plinio el viejo, aunque no eran como los espejos de hoy y no se utilizaron ampliamente en esa época.
Sin importar el material, mirar el reflejo en un espejo nos permite una apreciación parcial e incompleta de la realidad, la biblia hace una referencia a este hecho en la 1 Corintios 13:12 donde dice “Ahora vemos por espejo, oscuramente; más entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido.”
La referencia es una ventana a la eternidad con Dios para aquellos que hemos puesto nuestra confianza en Jesucristo como Señor y Salvador, que nos lleva a entender que conocemos a Dios, pero no como Él nos conoce, y que un día, Dios no será más una imagen incompleta para nosotros, sino que le apreciaremos enteramente y en todo Su esplendor.