Ya empezó la temporada 2012… ¿sabe si tiene y cuánto es su deducible por huracanes?
Si usted vive en un estado costero, le conviene buscar su póliza de seguros de propietarios de vivienda (homeowners insurance) y conocer cuánto es su deducible en caso de un huracán. El deducible es la cantidad de dinero que el asegurado debe pagar de su bolsillo antes de que su cobertura de seguros se active y pague las reparaciones necesarias causadas por un huracán. Los deducibles por daños y los deducibles por daños por huracanes están claramente especificados en su póliza, lo importante es conocer cuánto es cada uno en su caso particular, indicó el Insurance Information Institute (I.I.I.).
La temporada de huracanes oficialmente comienza el 1 de junio y termina el 30 de noviembre, pero nadie controla el clima, y como este año, algunas tormentas llegan antes o después, por lo que es importante conocer con suficiente tiempo los detalles de su póliza.
“Los deducibles de huracanes se establecieron como una forma de compartir el creciente riesgo a estos desastres allí donde el alto crecimiento de los desarrollos urbanísticos en zonas costeras destacaba más, y para lograr mantener costos asequibles de seguros privados y primas manejables y competitivas”, indicó Elianne E. González, portavoz I.I.I. “Por eso, hoy día si un propietario desea tener una casa en la costa, debe estar dispuesto a compartir el mayor riesgo a daños por un huracán que estará asumiendo, con el que asume su aseguradora; esto es, en la forma de un deducible específico que sólo entra en acción si hay un huracán”.
Dieciocho estados costeros del país han incorporado la figura del deducible de huracanes en sus pólizas de seguros, a saber: Alabama, Connecticut, Delaware, Florida, Georgia, Hawaii, Louisiana, Maine, Maryland, Massachusetts, Mississippi, New Jersey, New York, North Carolina, Rhode Island, South Carolina, Texas y Virginia.
El deducible estándar de las pólizas de seguros de propietarios en casos de incendios, robo, explosión, vandalismo, tornados, nieve, etc. (lo que también se conoce como “todos los demás desastres” o “all other perils” en inglés), se lista en la póliza de seguros y suele aparecer como una cantidad específica en dólares, sea de $500, $1.000, o más. Los deducibles de huracanes están claramente nombrados en la póliza pero por lo general se describen como un porcentaje de la cobertura total de la vivienda y varían entre un 1%, 2%, hasta un 5% o más del valor asegurado de la propiedad.
Es decir, si su casa está asegurada por un total de $300.000 y la póliza indica que usted posee un 5% de deducible por huracanes, esto quiere decir que si su vivienda sufre daños por un huracán usted será responsable de pagar los primeros 5% de $300.000, o sea, los primeros $15.000 de la reclamación por los daños que cause el huracán.
Los deducibles por un huracán se disparan en situaciones específicas que hacen que se cumplan ciertos criterios especificados en su póliza y regidos por las regulaciones estatales de seguros y la forma cómo su aseguradora ha determinado que cumplirá con dichas leyes. Por ejemplo, pudiera ser que su deducible de huracanes se “dispare” si el Servicio Nacional de Climatología o National Weather Service (NWS) determina que una tormenta entró a su zona como un huracán de Categoría X (de 1 a 5). Los deducibles por huracanes varían de un estado a otro y usualmente se pueden aplicar cuando el NWS bautiza una tormenta tropical, declara una advertencia o un aviso de huracán, o define la intensidad del mismo.
En algunos estados es posible que usted pueda pagar un poco más de prima por su seguro para obtener un deducible de huracanes determinado en una cantidad específica, por lo general dependiendo de que tan cerca o lejos está la vivienda de la costa. Es frecuente que si una vivienda está en una zona costera de alto riesgo las aseguradoras determinen el deducible de huracanes que aplicará a esa póliza de seguros.
“Sea que usted viva a la orilla del mar o no, en una zona propensa a los huracanes o no, siempre es una buena idea revisar su póliza de seguros de vivienda y como mínimo hacerlo una vez al año; le interesa conocer cuáles son esos detalles del monto de su deducible, si está sujeto a un deducible por huracanes y cuánto es el monto de éste, y tener un plan de cómo hará frente a este costo en caso que un siniestro le obligue a presentar una reclamación a la aseguradora”, recomendó González. “El momento de hacer las preguntas a su agente o al representante de su aseguradora es cuando está comprando o renovando la póliza, no espere a sufrir un desastre o que se acerque un huracán para pedir que le expliquen cómo funciona su seguro.”
Los orígenes de los deducibles por huracanes
En 1992 el huracán Andrew causó daños de $15.500 millones (dinero de ese año), la tormenta más costosa que se registraba también causó reclamaciones cuatro veces mayores que se presentaron en el huracán anterior de similar impacto, que fue Hugo en 1989. Se hizo aparente que los modelos de riesgo que se venían usando estaban desfasados con el riesgo real que significaba el aumento del desarrollo urbanístico de las zonas costeras y lo mucho más vulnerable que éstas eran a los huracanes, por lo que fue necesario cambiar las proyecciones de los riesgos de las aseguradoras y el cómo éstas las enfrentarían desde entonces.
Pero también cambió la forma como las compañías reaseguradoras ofrecían el reaseguro. Muchas de las grandes aseguradoras que ofrecían seguro a los consumidores se vieron en dificultades para obtener reaseguro (seguro para las aseguradoras) que protegiera su exposición a los riesgos porque las reaseguradoras no estaban dispuestas a exponerse tanto atan altos riesgos. Para lograr que las reaseguradoras extendieran sus coberturas, las aseguradoras se vieron forzadas a exigir que los asegurados compartieran más parte de esos riesgos que ellas estaban tomando.