¿Andas con el GPS de tu vida apagado?
En estos días cada vez más gente tiene en su auto un GPS para encontrar prácticamente cualquier dirección en el país. El GPS se ha convertido en un aparato esencial para llegar a cualquier destino con una exactitud impresionante, no solo puedes encontrar direcciones sino que además el GPS te indica en qué lugar te encuentras, a qué velocidad vas, el tiempo que te va a tomar llegar a tu destino, y por si fuera poco, recalcula la ruta en el dado caso que te desvíes o tomes la ruta equivocada.
Con un GPS es prácticamente imposible perderse, y si eliges el destino correcto vas a lograr llegar el 100% de las veces.
¿No sería fabuloso que tuviéramos un GPS interno que nos permitiera elegir el destino al que queremos llegar en la vida?
No solo eso, sino que de igual manera nuestro GPS interno nos permitiera trazar la ruta más rápida para llegar a nuestro destino.
Imagínate que además ese GPS te avisara cada vez que tomas el camino incorrecto en la vida, y recalculara la nueva ruta que te llevará nuevamente a alcanzar tu meta, tu destino.
Con un GPS interno todas las cosas serían mucho más fáciles de lograr, con menos desviaciones en el caminar por la vida.
Pues te tengo buenas noticias; resulta que ese GPS interno si existe, y lo has tenido dentro de ti desde el día que naciste, solo que no es como el GPS que todos conocemos.
Ese GPS está formado por medio de tu cerebro (intelecto), y de tus sensores (tus sentidos) como lo son la vista, etc. La única diferencia entre tu GPS y el aparato electrónico es que este último no tiene voluntad propia o libre albedrío.
El GPS electrónico, está programado para llevarte del punto A al punto B sin ponerse a “pensar” si afuera hace frío, o si está lloviendo, ni si tiene o no ganas de hacer su trabajo.
¿Tienes encendido tu GPS, o andas por la vida sin un destino determinado, sin metas, sin anhelos; o te equivocas de ruta y ni siquiera tratas de volver al camino correcto?
Debido a que nosotros tenemos la libertad de elegir lo que queremos hacer, en ocasiones nos tropezamos una y otra vez, y si a eso le agregamos el conformismo y el desánimo, entonces poco a poco, dejamos de anhelar cosas, dejamos de soñar y permitimos que la corriente nos lleve sin poner resistencia alguna.
Te invito a que le quites el polvo a tu GPS interno, que cargues su batería y atrévete a encenderlo, atrévete a elegir un nuevo destino, atrévete a equivocarte y a corregir el camino, y a retomar las riendas de tu vida una vez más hasta que logres llegar a tu destino en la vida. NUNCA APAGUES TU GPS.
Deseándote éxito en la vida,
Eduardo Silva
678-379-9606
www.EduardoSilva.biz