Suicidio: Un enemigo silencioso

Por: Rafael Navarro- ENG.

El chico al que llamaremos Miguel, es real, tiene 17 años, nació aquí en Georgia de padres mexicanos y es alumno del último grado de Bermark High School en Lilburn, es el mayor de 6 hermanos y cuando estaba en el noveno grado empezó a sentirse deprimido y solo y comenzó a explorar opciones para acabar con su vida.

Miguel dice que todavía le cuesta trabajo concentrarse bien en los estudios, a pesar de que hace algún tiempo decidió contar su experiencia a sus consejeros en la Clínica de Educación Tratamiento y Prevención de la Adicción—CETPA, de acuerdo a sus siglas en inglés. Hoy, está consciente que nunca tomaría esa decisión.

“Me enamoré de alguien y no fui correspondido, me sentía muy solo, en mi casa tenía problemas y mis amigos me decían que estaba loco”, narró el joven, seguro ahora de que su testimonio pueda ayudar a salvar alguna vida.

“Empecé a pensar, cómo iba a hacer para acabar con todo, una vez tuve un cuchillo en mis manos, pero me dio mucho miedo, decidí que no sería así, sino quizá con pastillas, con drogas…no sé”, comenta.

Pero Miguel no estaba solo, un día un amigo le contó que él había intentado suicidarse tomando pastillas con cerveza y que la experiencia había sido muy cruda.

“Yo no puedo hacer eso tampoco”, pensó el chico, a pesar de que su estado de ánimo, la incomprensión de sus padres, los problemas con los demás compañeros, su forma solitaria de ver el mundo y lo que pudiera llamarse su “carga” de problemas no habían desaparecido.

La realidad

“El suicidio es el mayor problema de salud pública. Cerca de 30,000 personas mueren por suicidio cada año en los Estados Unidos. El porcentaje es más alto en personas que mueren por suicidio, que por homicidio cada año”, dice Vilma Orrego consejera del programa de prevención contra el suicidio de CETPA.

Según la Alianza Nacional de la Salud mental – NAMI, el suicidio no discrimina, personas de ambos sexos, edades, raza, religión y origen étnico son susceptibles a suicidarse, pero debemos estar alertas y atentos, porque las personas que corren más riesgo siempre comparten ciertas características.

Resultados sobre el suicidio juvenil, basado en las estadísticas nacionales, mencionan que un promedio de 2 jóvenes entre las edades de 10 y 24 mueren por suicidio cada semana. Uno de cada 10 estudiantes de secundaria reportaron haber intentado suicidarse, casi 1 de cada 6 estudiantes entre las edades de 12 a 17 han considerado seriamente suicidarse.

Más del 30% de los jóvenes respondieron que tuvieron un intento de suicidio en el último año. Más del 50% de los jóvenes transexuales habrá tenido un intento de suicidio antes de cumplir los 20 años.

Qué pasa con los latinos

“Es importante considerar las estadísticas sobre la salud mental en la comunidad latina”, dice Orrego. “Las mujeres y los latinos tienen más tendencia a experimentar un episodio de depresión clínica. El índice de depresión en las mujeres latinas es 46% más alto que en los hombres. El porcentaje en los hombres latinos es el 19.6%”

El suicidio entre los adolescentes ha tenido un aumento dramático en los años recientes, siendo la tercera causa de muerte más frecuente para los jóvenes de entre 15 y 24 años de edad, y la sexta causa de muerte para los de entre 5 y 14 años, según el Centro Latino de Investigación.

Sally Vander Straeten, coordinadora del Programa de Prevención de Suicidio del Departamento de Salud, Comportamiento y Discapacidades del Desarrollo de Georgia señala que hay que acabar con los estigmas a cerca del problema y hablar del mismo haciendo énfasis en la enfermedad.

“Tú puedes salvar vidas, debemos comenzar a aprender a identificar los aspectos que llevan a una persona a auto eliminarse y eso empieza, educándonos y educando a la comunidad”.

De acuerdo a Adam Lesser, director de la división de salud mental del proyecto de Prevención de Suicidio entre Jóvenes, Garrett Lee Smith, alrededor de 900 suicidios ocurren cada año en Georgia y de 110 a 120 son personas entre los 10 y los 24 años de edad.

Cada año también entre 10 y 12 casos de suicidios ocurren en el condado de Gwinnett, representando un 10% del total de todo el estado y es la tercera causa de muerte entre el grupo de edad de 10 a 24 años después de los accidentes.

Las mujeres llevan la delantera

Según Sally Vander Straeten, por cada hombre que es hospitalizado por intento de suicidio, 2 mujeres corren la misma suerte, el índice de muertes por esta causa es de 4 mujeres por cada hombre y ellas lo intentan 2 veces más que los varones.

Cifras reveladas por las autoridades también, advierten que uno de cada tres suicidios de jóvenes en Georgia se lleva a cabo con un arma de fuego propiedad de un miembro de la familia.

Adicional a esto, cada año, en Georgia hay 700 a 800 jóvenes que son hospitalizados por intento de suicidio.

Según la Oficina de Revisión de la Mortalidad Infantil de Georgia: “Aunque las tasas varían un poco según la ubicación geográfica, en un salón de clases normal, es probable que 3 estudiantes -1 hombre y 2 mujeres- han un intentado suicidarse en el último año.”

Pero muchas veces los padres lo ignoran, por eso María, la
madre de Miguel, no daba crédito a lo que dijeron los consejeros de CETPA cuando la enteraron de las intenciones suicidas de su hijo.

“No creía lo que me decían, lo veía normal, a veces estaba de mal humor, pero yo lo dejaba hasta que se le pasara, pero no se qué hubiera pasado con mi vida si él se hubiera muerto”, dice la mujer entre lágrimas.

“Me hubiera muerto con él”, señala, sin embargo es consciente que ella a los 16 años intentó suicidarse y hace pocas semanas una hermana que está en México quiso hacerlo tomando medicamentos, y todo eso la tiene muy confundida.

Factores para tener en cuenta

Entre estos factores los expertos relacionan: Depresión, ansiedad y trastornos relacionados con el estado de ánimo; el alcohol y otras sustancias; tendencias impulsivas o agresivas; historia de un trauma, abuso o la victimización en el pasado o presente; enfermedades físicas, un intento previo de suicidio; antecedentes familiares de suicidio; desesperación y condiciones estresantes como tendencias homosexuales no aceptadas.

Ruptura de relaciones sentimentales, entre un 25% y un 50% se dan especialmente en la universidad; la muerte de familiares o amigos; la pérdida del trabajo; la detención, la suspensión en la escuela; la posible exposición a contagios, entre muchos otros.

INFORMACION

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