Demandan a anciano por la muerte de Rodrigo Díaz
La familia de Rodrigo Díaz Ortiz el joven de 22 años que el 26 de enero de 2013 fue asesinado por Phillips Sailors de 69, cuando el joven erróneamente fue conducido a la casa de su victimario por su GPS, ha presentado una demanda civil en la que exigen pagos funerarios, así como tratamientos médicos y sicológicos por la pérdida y el dolor causado.
Transcurrido más de un año del percance, la familia del joven muerto había guardado silencio e incluso el aniversario del fallecimiento se hizo en su país natal Colombia, y en Atlanta sus familiares lo recordaron de forma privada.
La demanda civil busca cubrir costos relacionados con la tragedia, debido a que, aun no se ha llevado a cabo un juicio criminal, en el que incluso, el padre de Díaz había dicho desde un comienzo no estaba interesado, porque eso nunca le iba a devolver a su hijo.
La ruta equivocada
El sábado 26 de enero de 2013 Rodrigo y tres amigos más planearon ir a patinar en las horas de la noche, pero antes debían pasar por una amiga, sin embargo el destino les jugó una mala pasada, el GPS los condujo hasta la casa marcada con el número 537 de la Hillcrest Road, en Lilburn, donde se detuvieron por un momento.
Quienes acompañaban a Díaz, dicen que un hombre se asomó primero por la ventana y luego salió e hizo un disparo al aire, pero cuando el conductor de 23 años, aceleró el carro para salir de la propiedad porque vio sus vidas en peligro, el dueño de la casa disparó de nuevo y esta vez le alcanzó la parte izquierda de su cabeza.
De acuerdo al parte médico oficial Rodrigo fue declarado muerto a las 6:08 am del 27 de enero en medio del dolor y la angustia de sus parientes. La bala que Phillip Walker Sailors de 69 años, veterano de la guerra de Vietnam y misionero laico en América Latina le había disparado, “le causó graves daños al cerebro y los huesos del cráneo”
Phillip Walker Sailors, fue acusado formalmente de asesinato malicioso ese mismo día, según consta en el reporte policial, e ingresado a la cárcel del condado de Gwinnett sin derecho a fianza, aunque luego salió y se ha mantenido libre.