Con una semana en el poder, Trump emite varias órdenes ejecutivas
Por: Adriana García
Durante su campaña electoral, el nuevo presidente Donald Trump prometió que habrían grandes cambios en esta nación una vez que diera inicio su mandato presidencial. Asimismo, en su discurso de toma de poder, declaró que ese día marcaba la transferencia del poder de manos de la elite política estadounidense a manos del verdadero pueblo americano.
Sin embargo, hoy pareciera esa idea más lejana que antes, ante el gran desacuerdo de miles de ciudadanos norteamericanos por las nuevas políticas trompistas y ante la inesperada lluvia de órdenes ejecutivas que implementan de manera inmediata las propuestas del dirigente. Si bien, el corte político de Trump no es desconocido, la ejecución tan rápida de esas promesas ha provocado un shock en el mundo y la misma nación americana.
En el día tercero de su gobierno, Trump confirmó su intención de renegociar el tratado de libre comercio con México NAFTA, a fin de favorecer más a la industria norteamericana en un tratado supuestamente “desfavorable para los Estados Unidos”. Esta situación que ya había puesto de nervios a México, se sumó a la reciente declaración de Trump, en el día 7 de su gobierno, sobre el hecho de que México tendría que pagar la construcción del muro en la zona fronteriza común entre ambos países y el posible incremento de los aranceles sobre productos mexicanos hasta en un 20%.
Esta postura irritó al presidente mexicano Enrique Peña Nieto tanto, que la reunión bilateral agendada la semana pasada fue suspendida. Al margen de estos acontecimientos, también Trump se reunió con líderes empresarios norteamericanos, a quienes informó de su intención de recortar las regulaciones a industrias estadounidenses hasta en un 75%, en tanto que dijo que Los Estados Unidos no formaría más parte de la agrupación comercial asiático-pacífica trasatlántica TPP12, a la que Barak Obama dedicó tantos esfuerzos. En este mismo día, también negó la provisión de fondos económicos a organizaciones internacionales que apoyan e informan sobre el aborto.
Día 5o, Trump firmó una orden ejecutiva para la construcción de líneas petroleras que recorrerán territorio ocupado por la tribu india Sioux, quienes a su vez indicaron que esta acción constituye una violación a sus derechos tribales. Organizaciones ambientalistas se declararon en contra. Día 6, Trump firmó dos órdenes ejecutivas para la construcción del famoso muro a lo largo de la frontera común con México y la eliminación de fondos gubernamentales destinados a subsidiar las llamadas “ciudades santuarios” para inmigrantes.
Día 10, Trump emite una orden ejecutiva para la suspensión del programa de refugiados sirios y la restricción por un período de 90 días, en la entrada de 7 naciones musulmanas a Los Estados Unidos, hecho que causó gran consternación a nivel nacional e internacional. Tales países incluyen a Irak, Iran, Libia, Somalia, Sudan, Siria y Yemen. Al respecto, senador John McCain y Lindsey Graham advirtieron que esta acción lejos de evitar futuros ataques, sólo favorecerá el reclutamiento de más personas en el terrorismo.
Dichas disposiciones del nuevo gobierno estadounidense han ido de la mano con innumerables protestas públicas en diversas ciudades del país, en contra de Trump. Por su parte, varios diplomáticos presentaron un documento de reprobación al Presidente Trump, indicando que su postura radical sólo emitirá un mensaje equivocado al mundo y a los musulmanes.
Importantes empresarios como Howard Schultz, presidente ejecutivo de Starbucks, repudió la orden de Trump en materia de inmigración y prometió contratar a 10 mil refugiados
en los próximos 5 años. Al mismo tiempo, Brian Chesky, fundador de Airbnb, ofreció alojamiento gratuito a refugiados rechazados por USA, mientras que el cofundador de Google, Sergey Brin se unió a una protesta en el aeropuerto internacional de San Francisco.