Trump continúa trabajando en su agenda de gobierno
Adriana García
Esta semana, la despiadada decapitación del alemán Juerguen Kantner por el grupo islámico terrorista filipino Abu Sayyaf; el escándalo venezolano sobre la adquisión de alimentos exportados de México y vendidos a precios extraorbitantes en un ambiente de profundas carencias de bienes alimenticios en Venezuela; y el asesinato del hermano del líder norcoreano Kim Jong en Malasia; acompañaron los encabezados sobre las recientes acciones del gobierno de Donald Trump.
Las directas y constantes declaraciones de Trump en diversos temas han mantenido ocupados y en expectativa a los medios de comunicación estadounidenses en las más de 4 semanas de su gobierno. En estos recientes días, el Presidente enfocó su atención en la elaboración del presupuesto para el año fiscal 2018, que será presentado ante el Congreso en marzo y el cual será aplicable a partir de octubre de este año. Trump indicó su intención de reducir el número de funcionarios que trabajan para la actual gestión, así como de recortar la ayuda internacional hacia otros países, a fin de destinar mayores recursos financieros a rubros como el de defensa. De acuerdo con su agenda, el Mandatario se comprometió a destinar cerca de más de 50 mil millones de dólares al mejoramiento estratégico y estructural militar, hecho que ha sido duramente criticado por especialistas en el tema, quienes cuestionan el cómo esto ayudará al mejoramiento y protección de Los Estados Unidos en la práctica.
Trump ha insistido sobre la importancia de actualizar sectores estratégicos de la Defensa nacional e internacional de esta nación, la cual de acuerdo con sus propias palabras, se halla en desventaja para combatir problemas profundos tales como el terrorismo y otro tipo de amenazas mundiales. Según Trump, su gobierno tratará de hacer “más con menos y lograr que este país gane más guerras”. Por su parte, el Director de Presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvani, hizo eco de las palabras del Presidente al indicar que “se va a gastar menos en el extranjero y más en casa”, aún cuando la ayuda a otros países sólo representa el 1% del total del gasto federal. Al día de hoy, Los Estados Unidos destina cerca de 59 mil millones de dólares en gastos de Defensa.
En un tono de total convencimiento, Trump ha manifestado que se ha logrado un “increíble progreso” en tan sólo un mes de su mandato, habiéndose firmado cerca de 24 ordenes executivas y de varios documentos importantes. Al respecto, la opinión pública se encuentra dividida y de acuerdo con Gallup, Trump registra una desaprobación popular del 53% y una aprobación del 41%, que lo ha distinguido de los dos últimos presidentes Obama y George Bush, quienes en su primer mes de administración contaron con un 60% de aprobación popular. Mientras que para algunos, Trump ha mostrado estar comprometido con sus promesas de campaña electoral, otros señalan que su línea de acción política es extrema y un tanto peligrosa y que podría incluso poner en riesgo la estabilidad económica y política del país.
Aún cuando en apariencia, el Presidente ha podido llevar a cabo acciones inmediatas de manera unilateral gracias a las ordenes ejecutivas, algunos analistas advierten que, en la realidad, el uso de esta herramienta gubernamental no ha sido excesiva si se le compara con el ex presidente Barak Obama, quien firmó más ordenes ejecutivas que el mismísimo Trump. Por ahora, el Partido Republicano controla tanto el senado como el congreso, lo que para muchos garantiza que Trump lleve a cabo su agenda al 100%. Sin embargo, las imprevisibles reacciones de Trump se constituyen un factor que podría cambiar la balanza política en cualquier momento.