¿Qué significa para usted la libertad de prensa?

 ¿Qué significa para usted la libertad de prensa?

“La libertad de prensa, lo mismo que todas las libertades, tendrá sus inconvenientes, tendrá sus peligros; pero con todos ellos es preferible a la tranquila placidez del despotismo, como decía tacito”.
José Maria Vigil

El día tres del mes de Mayo ha sido designado por la UNESCO como la fecha conmemorativa de la libertad de prensa en todo el mundo y desde su creación ha dedicado su esfuerzo a destacar el esfuerzo, la lucha y el desafío de cientos de periodistas que buscan exponer la verdad aun a costa de su propia vida.

En esta oportunidad y por primera vez, los eventos de celebración tienen como sede a Estados Unidos, en donde 100 discursantes en representación de 44 países exponen sus expectativas y conclusiones de lo que significa hoy por hoy el ejercicio del periodismo, las nuevas tendencias de la comunicación con énfasis en las formas digitales y el periodismo electrónico, así como riesgos antiguos y nuevos que rodean a uno de los oficios más nobles pero de igual manera peligroso del ser humano.

Paradójicamente este año el ganador del premio mundial de la libertad de prensa, Guillermo Cano que otorga la Unesco, es el periodista iraní Ahmad Zeidabad, quien tras haber desafiado al gobierno de su país, con un periodismo crítico y de oposición, cumple una pena en prisión de seis años.

Como si la libertad de expresión estuviera condenada a ser silenciada, este valeroso periodista ha sido encarcelado en varias oportunidades por su posición frentera y reaccionaria ante el régimen político iraní, siendo la ultima consecuencia de la disputa electoral en el 2009 en su país. Ahmad junto a 40 colegas más fueron arrancados del ejercicio periodístico, pero su legado hoy es reconocido en todo el mundo y puesto de ejemplo a las nuevas generaciones de periodistas.

Y es que la labor del periodista y su afán por exponer los hechos a la opinión pública, lleva a que nos enfrentemos permanentemente a situaciones de riesgo, no solo de quienes intentan neutralizarnos sino también a problemas de seguridad en todo el mundo. Hoy se cuentan por decenas los periodistas que en la última década han caído en el ejercicio de su profesión a manos de asesinos, siendo en la mayoría casos que han quedado en la impunidad.

Y qué decir de los corresponsales de guerra, que aunque entrenados para ello, se encuentran muchas veces indefensos pues son sus únicas armas, el micrófono, la cámara, el computador, el teléfono o el lápiz y la libreta de apuntes, instrumentos que en nada sirven para resguardar la vida cuando se cubren acontecimientos en zonas de conflicto. Un ejemplo reciente es la muerte de dos periodistas en Lybia en donde la lucha por derrocar a Muammar Gadhafi los llevó al frente de batalla para cubrir los hechos, pero el intercambio de proyectiles acabó con sus vidas.

Así mismo en Lybia, la retención de reporteros por varios días, a manos de las tropas leales al régimen en ese país nos hace pensar que hoy más que nunca el periodismo tiene un riesgo aun mayor por cuanto en función de la inmediatez, de lo avanzado de la tecnología ponen al periodista en el instante mismo cuando dos fuerzas opuestas se enfrentan en el campo de batalla y ante eso, también a merced de lo impredecible.

Pero esa dedicación, esa valentía y esa perseverancia son las que traen la verdad al dominio público. Son los periodistas comprometidos con su misión, los capaces de correr tal riesgo.

Las imágenes de periodistas atacados en varios países en donde hoy hay revueltas populares de oposición a regímenes y tiranos, como en el medio oriente y otros países de sistemas políticos totalitarios, son una muestra del enorme riesgo que corren los corresponsales, de guerra, los reporteros, los periodistas y comentaristas que entendiendo su oficio, ponen en peligro su propia vida.

Ni que decir de aquellas regiones en el mundo en donde está cerrada la entrada a los periodistas extranjeros, y no obstante muchos se valen de mil maneras para obtener la información que será compartida con todo el mundo, para lo cual, fenómenos como el internet y los teléfonos celulares, están jugando un papel protagónico en aras de dotar a los periodistas de nuevas herramientas para su trabajo.

Sin duda la celebración de la libertad de prensa en el mundo, tiene mucho que debatir, se abre un nuevo universo de posibilidades para acceder a la verdad, pero los riesgos siguen siendo casi los mismos, ser silenciados por las fuerzas oscuras de poder.

Rafael Navarro

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