Comunidad latina de Cobb respira más tranquila
Fue un domingo diferente, los alguaciles del sheriff y los policías de Smyrna parecían tener otro ánimo y por ese día se veían relajados y dispuestos a abrazar, sonreír, bailar e intercambiar un plato de comida con miembros de la comunidad latina, quien durante mucho tiempo se mostró reacia a acercarse a ellos.
Por su parte, el Sheriff, Craig Owens, con delantal y espátula en mano, preparaba las hamburguesas y el asado para los participantes de esta jornada que más que de comida, estaban hambrientos de cambios positivos de parte de las autoridades locales.
Con su lema: un equipo, una lucha, una comunidad, el Sheriff del Condado de Cobb, Craig Owens quiso inaugurar esta nueva etapa de relaciones con la comunidad, que se había distanciado de la institución como consecuencia de las nefastas medidas de la 287 G, destinada a deportar sin piedad a indocumentados de su jurisdicción.
Finalmente, desde enero la mencionada 287G no se aplica en el condado, pero a consideración del despacho del alguacil, se tiene que dar nuevos acercamientos para lograr que el trabajo conjunto entre la comunidad y su oficina sea factor determinante para garantizar la seguridad de la población.
Por eso para romper el hielo, la oficina del sheriff en conjunto con líderes locales y religiosos llevó a cabo este evento especial ante el asombro de los miembros de una comunidad que nunca pensaron que un día como este podrían disfrutar de una hamburguesa preparada por el propio sheriff.
Más que un día festivo
“Es un día festivo en que somos una sola comunidad, un solo equipo, en que podemos estar todos juntos en el Condado de Cobb, en una sola lucha somos una comunidad “, advirtió el sheriff Owens, mientras sonreía a los presentes y los invitaba a degustar su asado.
Guillermo García, miembro de la comunidad expresó su complacencia al quedar atrás ese pasado oscuro que sembró el temor en la gente y los alejó de la policía.
“Muchas personas tienen miedo a la policía, a las autoridades y eso los hace temer a las unidades del condado, pero todo eso va a cambiar con el nuevo sheriff”, expresó García.
Por su parte, el doctor Andrés Mora, capellán instructor del Departamento de Seguridad Nacional, se refirió a la importancia de este acercamiento.
“Es importante que las dos partes se pongan de acuerdo. Algo interesante cuando la policía quiere acercarse a la comunidad, no sabe cómo hacerlo y viceversa, pero cuando eventos como este suceden, cuando la policía pone un “extra”, cosas interesantes suceden”, dijo.
El Pastor de la Iglesia Roca de Salvación de Smyrna, donde se llevó a cabo el asado, Feliz Ferrufino, destacó la importancia del proceso de sanación que se necesita para restaurar esas relaciones perdidas.
“Es necesario hacer una reconciliación entre nuestras autoridades y una comunidad que sufrió mucho en el pasado”, enfatizó.
La estrategia del sheriff Craig Owens es el de trabajar juntamente con los líderes y personas visibles de la comunidad para desterrar el miedo que los mantenía distantes. De hecho, para muchos, este ejercicio ha reducido el miedo, el estrés y ha devuelto la confianza necesaria para esa labor conjunta que espera lograr el alguacil.
Hoy se respira un aire distinto, lejos de aquellos días en que la comunidad de Cobb sufrió duramente las consecuencias de la 287 G, la gente observaba casi a diario retenes, deportaciones y también el drama y sufrimiento de familias enteras separadas en cumplimiento de la implacable ley.
Entre 2014 y 2018 se llevaron a cabo al menos 36 mil detenciones entre los condados de Cobb, Hall, Gwinnett y Whitfield. De estas cifras 5 mil de las cuales corresponden a la aplicación de la 287 G. En el 2018, en el Condado de Cobb se presentaron 376 casos para deportación… ¡por fortuna para todos, esos días ahora son historia!