Demandan por licencias de conducir
El Nuevo Georgia News
El viacrucis de Amarilis López Moscoso, no termina desde aquel día de noviembre de 2011 cuando fue detenida por la Patrulla Fronteriza, cuando venía de Guatemala de regreso a Estados Unidos. En esa primera oportunidad fue devuelta.
A los pocos días intentó cruzar de nuevo y volvió a ser devuelta, hasta que a la tercera vez, contó la historia de su hijo que estaba en Estados Unidos y que requería de su compañía y cuidados y fue cuando le dieron una orden para comparecer ante una corte de inmigración.
“Estuve detenida durante un tiempo, luego me dejaron salir con un grillete y me asignaron un oficial con el que debía reportarme, y cuando se me estaba venciendo el plazo, que me dieron, él mismo me preguntó si me quería regresar o si había decidido quedarme”, contó López.
“Yo, dije que me quería quedar, entonces me mandó a que buscara un abogado para que peleara por la ampliación de mi estadía”, recordó.
A López le fue concedido un permiso de trabajo bajo la categoría C-18, que corresponde a personas con una orden de deportación, que se encuentran en el país de manera supervisada y eso le da derecho de acuerdo a las normas federales de obtener un permiso de trabajo y un número de seguro Social, los que le fueron otorgados por primera vez en el 2013, y así obtuvo su licencia de conducir en Gwinnett.
En el 2014 renovó su licencia, pero en el 2015 cuando llegó nuevamente a las oficinas del Departamento de Vehículos y Motores le dejaron saber que ella no calificaba para la renovación por su estatus migratorio, y le pidieron que fuera a cambiar su estatus.
“Pedí que me dieran por escrito el motivo por el que me negaban la licencia y me dijeron que ellos no me podían dar nada, entonces fue a Cobb y allá fue peor, porque solo de verme el papel en la mano me mandaron salir”, explicó López.
Siguió recorriendo oficinas hasta que en el condado de Fayette, le dijeron que podían estudiar su caso y en los siguientes 8 días le enviaron una carta diciéndole que podía tramitar su licencia.
Demandan al DDS
La firma de abogados Taylor & Lee presentó el pasado lunes una demanda colectiva ante una corte federal en Atlanta, contra el Departamento de Servicios al Conductor de Georgia, DDS–por sus siglas en inglés– alegando que la agencia en mención viola los derechos constitucionales de los afectados al negarles las licencias de conducir
“La demanda lo que busca es que no apliquen un criterio electivo en relación al otorgamiento de licencia cuando el inmigrante cuenta con un permiso de trabajo expedido por autoridades federales de inmigración”, dijo el abogado Aarón Ortiz.
“Esto es por cuestión de seguridad de la comunidad, para estas personas, y para el resto de la gente porque pueden andar manejando con licencias…”, anotó.
Anteriormente, estas personas podían obtener licencias de conducir en Georgia, según la demanda. Pero el Estado comenzó a rechazar las solicitudes este año, primero en Gwinnett y Cobb y ahora en todo el territorio, alegando que los solicitantes bajo estas categorías especiales, no están legalmente en los Estados Unidos.
Si usted está bajo orden de supervisión, le han negado la licencia y quiere hacer parte de esta demanda, puede contactarse con el bufet de abogados de Taylor & Lee en Norcross.
