“Tatuajes como elemento de control”
Por: Cipriana Rincón.
Detallar los horrores que viven las victimas de tráfico humano, contar los mecanismos de control y represión que usan sus captores es moralmente apropiado; incluso tocar temas tan difíciles y escabrosos como el uso de tatuajes como elemento de control de estos criminales.
Hoy en día, los tatuajes son usados extensamente en nuestra sociedad como decoración corporal. Jóvenes de ambos sexos han acogido el tatuaje como parte de la moda, la popularidad del tatuaje ha sido influenciada por los medios de comunicación. El cine, la televisión, la prensa y el internet hablan constantemente sobre el arte del tatuaje, lo que ha ayudado a que sea aceptado ampliamente en nuestra sociedad.
Para algunos jóvenes su primer tatuaje es sinónimo de independencia, estos pueden escoger tatuajes entre una gama inmensa de diseños y colores. En general, cuando se deciden por un tatuaje es porque quieren demostrar su independencia o libertad.
En el caso de las victimas de tráfico humano esto es diferente, estas han sido forzadas a tatuarse y no tiene nada que ver el tema de la libertad o de la liberación; sus captores las obligan a tatuarse con mensajes abusivos y degradantes. Estas mujeres y jóvenes son tatuadas para indicar que son propiedad de cierta persona o de cierto grupo de personas.
La policía ha encontrado mujeres tatuadas en diferentes partes del cuerpo como el cuello, caderas o vientre; llevan inscripciones como “Im your Little bitch” (Soy tu putica) o “La Mafia es mi dueña” o “Bend me down” (Agáchame o dóblame) o varias chicas llevando tatuajes con las iniciales de su “Pimp” (Agente o Chulo).
Con esta clase de marcas que indican la pertenencia a otra persona o grupo de personas son “herradas” mujeres y adolescentes para ser explotadas sexualmente, para ser vendidas varias veces al día y producir dinero para sus captores.
Los comerciantes que marcan sus animales o que rotulan sus mercancías lo hacen para llevar un registro de cuantos caballos, toros vacas, u otros artículos tienen y para que no se confundan con las de otro comerciante.
Así mismo, los comerciantes de tráfico humano están marcando a sus víctimas. Pero existe una gran diferencia entre la trata de personas y el comercio con animales. Los delincuentes de tráfico humano marcan a sus víctimas para demostrar “propiedad” es decir, que son los dueños de estas personas. Esta práctica inhumana despoja a las víctimas de su autoestima y al derecho innato de cada ser humano. El ser LIBRE.
Jóvenes tatuadas con la marca de sus captores viven aquí en nuestra comunidad; son usadas, vejadas y ultrajadas. Son vendidas muchas veces al día y sus dueños usan el tatuaje como un elemento más de control y de poder.
Ayuda a liberar a una víctima de tráfico humano. www.notbuyingit.org www.streetgrace.org. Llama para reportar crímenes de tráfico humano al: 888-373-7888