Más que “un buen muchacho”
No por ser su madre, Elizabeth puede ser la persona que más le conozca, es que Mario es un chico que a primera vista parece tan poco expresivo, que solo basta con que se le toque el tema adecuado y va desencadenando una historia que comienza a fascinar de principio a fin, y aun quizá sin entregar una sonrisa, uno puede saber que está disfrutando la plática.
Lo mismo pasa con Elizabeth su madre, quien pareciera tener problemas para hilvanar con las palabras precisas las alegrías y satisfacciones que su hijo de apenas 15 años le ha dado, y un brillo en su mirada delata ese orgullo natural que podría decirse desarrollan las mamás, pero al mismo tiempo esa convicción de haberlo encarrilado por el camino correcto.
“Es juicioso, es aplicado, es obediente…sabe respetar…es un buen hijo”, dice Elizabeth Alemán, quien confiesa que hay veces que los sueños de su hijo la han llegado a estremecer.
“…Cuando me cuenta mami, yo voy a ser esto o voy a hacer aquello…yo lo oigo y lo veo tan convencido, entonces él me dice, vas a ver que lo voy a hacer…”, narra la mujer de origen mexicano.
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Un duro de la tecnología
Como muchos de los niños, adolescentes y jóvenes de esta época, Mario es un apasionado por los videojuegos, las aplicaciones, los sistemas y los llamados aparatos inteligentes, pero no solo porque quiera pasar el tiempo con ellos, sino porque su meta de vida está enfocada en lo que pueda desarrollar en esa industria.
Para ello, Mario quien es un estudiante valedictorian, de la escuela Cross Kyes, con un promedio de 4.1, tiene una rutina ya establecida, que como él mismo lo cuenta, comienza desde antes de las siete de la mañana cuando se levanta, se va a su escuela, termina las clases a las 3:15 de la tarde, se va ensayar con la banda hasta las 6 de la tarde y luego regresa a casa, para cenar, hacer las tareas y más tarde reunirse con los otros miembros del club de videojuegos.
Con esa rutina, el tiempo que le queda libre para distraerse como cualquier otro adolescente de su edad, lo aprovecha bien, rodeándose de lo que él llama buenos amigos, porque en eso también ha aprendido a ser selectivo.
Desde que entró a sexto grado y comenzó a tomar clases de música, descubrió que en ese ramo también había ingenieros de sonido y programadores y se le despertó su pasión por todo aquello que tuviera que ver con ese mundo de cosas que hoy hacen parte del vivir de todos los seres humanos.
Entonces se hizo parte de la Asociación de Estudiantes de Tecnología—TSA, por sus siglas en inglés, una organización fundada en 1950 que busca incentivar en chicos como él, su pasión por innovar en cuestiones de ciencias y transformar el futuro a través de ellas.
“Esto me ha ayudado mucho, veo muchas posibilidades y es lo que quiero hacer cuando grande”, afirma.
Junto con sus compañeros de TSA ya han logrado hacer dos videojuegos, y cada día son más las posibilidades que dice tener en este campo, porque cada vez su demanda es mayor entre personas de todas las edades.
Sostenerse como el primero
Mirando en retrospectiva, este chico tiene claro que en este momento es el número uno en una clase de alrededor de 230 más, pero nunca fue así, y sabe que podría no ser siempre así sino pone todo su empeño en mantenerse.
“Durante la escuela intermedia no fui el primero, era el segundo, pero ya cuando pasé a la escuela secundaria me esforcé y logré el primer lugar desde que entré el año pasado”, dice y al mismo tiempo reflexiona.
“Ahora tengo que estar por encima de todos, pero también debo recordar que no siempre voy a ser el primero sino me esfuerzo…y siempre lo hago!”
Por eso, a su corta edad, afirma que todo lo que queremos lograr es posible si tenemos disciplina y estamos enfocados en lo que nos gusta, dejando tiempo para la distracción, pero sin perder de vista lo que uno realmente quiere.
“Yo les diría a los otros chicos que estudiar esa es la cosa número uno, porque si no estudian no pueden hacer nada, lo segundo es rodearse de buenos amigos, porque si se quedan con las personas malas, es más probable que hagan cosas malas, pero si se tienen buenas influencias vamos a hacer lo correcto”
Como otro fundamento para lograr el éxito estudiantil, en la profesión que escojamos y en la vida misma, tiene claro que el manejo del tiempo es fundamental.
“…lo otro es saber manejar su tiempo, no siempre tienes que jugar, uno puede hacerlo pero es más importante la educación…a mi me da tiempo para hacer muchas cosas y también para jugar…para todo eso…”
Un paso que Mario puede dar gracias a ti
Para finales de junio Mario ha sido seleccionado para participar en un Congreso de Ciencia y Tecnología, quizá uno de los más importantes en su género, el cual se llevará a cabo en Boston, y la invitación se ha dado gracias a sus logros como estudiante avanzado y al promedio escolar que ahora sostiene.
Sin embargo debido a los bajos recursos de su madre, le ha costado hasta el momento completar su aplicación y confirmación para su asistencia por lo que los organizadores han prorrogado el plazo de inscripción hasta marzo para que él no pierda el cupo.
De igual modo, sus maestros de la escuela Cross Kyes le han abierto una cuenta en Gofundme.com, para reunir 2 mil 500 dólares que requiere.
“La conferencia es para líderes del futuro…hay oportunidad de recibir mentoría, capacitación y una carta de recomendación para universidades en el área”, dice el joven.
Elizabeth su madre dice que Mario está muy contento de poder asistir, y que a ella le gustaría que lo hiciera porque es un chico muy concentrado en lo que quiere, muy ordenado y tiene los pies bien puestos sobre la tierra…
“Yo me siento muy orgullosa de él, porque son cosas que se presentan una vez en la vida y él las está sabiendo aprovechar, tiene muchas ganas de ir y con el empeño que tiene lo va a conseguir”, afirma.
Entretanto Mario, nos ha regalado una melodía que le hemos pedido que interprete con el saxofón, instrumento que ejecuta hace algunos años y al cual trata con especial cuidado, luego de concluir y sin vacilar es él quien pregunta.
¿Qué más quiere saber?
-Quiero saber ¿qué te ves haciendo en 10 años? Y la respuesta es tan espontánea como ha sido toda la entrevista.
“Me veo en la compañía que vamos a crear, donde yo voy a ser el líder de los programadores…”
Para apoyar a Mario
Para apoyar a este joven puede visitar: https://www.gofundme.com/3ahqgt2k o llamar al: (404) 915.6160 para detalles