Conductores siguen violando orden de parar frente a los buses escolares
Por: Rafael Navarro-ENG
Alicia Muñoz, tiene dos niños de 7 y 8 años que van a la Escuela Elemental de Oakcliff en Doraville y dice que en las horas de la maña cuando todas las personas van al trabajo, es cuando ella nota más que los conductores no respetan la señal de parar, mientras los buses recogen a los niños.
“A esa hora es cuando muchos se pasan”, dice Muñoz, luego de haber recogido a los dos menores en un complejo de apartamentos sobre la Pleasantdale Road, hora en la que hay más vigilancia por parte de la policía.
“Yo creo que las personas deberían tener más cuidado, por la seguridad de todos”, dijo la madre de origen mexicano.
Y es que, no detenerse cuando las señales de los buses escolares lo indican, aparte de resultar costoso para los infractores, se está convirtiendo en un dolor de cabeza para las autoridades quienes a diario colocan cientos de infracciones, pero ante la imposibilidad de vigilar todos los paraderos la tarea se hace cada vez más difícil.
Las cifras más altas
Ser el condado más extenso del estado, contar con la población más alta; tener el distrito escolar más grande, siendo el número 12 a nivel nacional, con 18 escuelas secundarias tradicionales; 16 escuelas intermedias y 77 primarias, además de alojar a unos 165 mil estudiantes, ya son cifras mayores.
Por eso el condado de Gwinnett tiene también al mayor número de conductores infringiendo la norma que señala que todos los vehículos deben detenerse cuando un bus escolar pone sus señales de “Stop” y las condiciones de la vía así lo indican.
En este sentido, hasta 100 personas por día son multadas, según cifras reveladas por las autoridades escolares recientemente.
La oficina del Superintendente de escuelas públicas del distrito, señaló que en lo que va corrido desde enero hasta finales de agosto, se habían impuesto alrededor de 1.920 citaciones a violares de la norma de detenerse cuando los buses escolares recogen o dejan a los estudiantes.
Solo en el año 2014, el número total de infractores subió al orden de los 12.244 y esas labores ahora se han hecho más efectivas, desde que las autoridades escolares decidieron instalar 300 cámaras de video en los automóviles, de tal manera que los violadores al código de tránsito en este sentido, quedan registrados en el sistema.
La cámara montada en el lado del conductor del bus detecta cualquier vehículo que pasa al lado del automotor una vez que las luces intermitentes amarillas se vuelven rojas. Si se detecta un vehículo, una imagen general en un ángulo de 180 grados de ancho muestra la violación y una imagen de alta definición captura la matrícula hasta cinco carriles de distancia.
Las multas
Las multas a que se hacen acreedores los conductores que infringen la norma de detenerse cuando un autobús escolar hace su trabajo cargando o bajando estudiantes, es una de las más altas y está entre las que los jueces no hacen concesiones, el monto oscila desde los 350 dólares para algunas ciudades y condados hasta los 500.
Carlos Niño, oficial de la policía de la ciudad de Brookhaven dice que los conductores citados por este tipo de infracción se enfrentan a una multa de 500 dólares la primera ofensa, $750 para la segunda infracción y $ 1,000 por la tercera ofensa y hasta 6 puntos en la licencia si se le encuentra culpable al conductor.
“Todos los conductores deben detenerse si un bus escolar está recogiendo o dejando a los niños, y ellos están justo detrás o al lado del autobús, y los conductores del lado contrario, deben hacerlo, si no hay un separador físico en la vía, si ese separador físico existe, entonces pueden seguir con precaución”, advierte el oficial.
De acuerdo a las cifras entregadas por ese nuevo departamento de policía, entre su creación el año pasado hasta mediados de 2015, se habían impuesto alrededor 300 citaciones, con un estimado general aproximado a los 150 mil dólares, siendo la Buford Hwy, la vía donde más infracciones se han escrito.
Para el condado de Gwinnett, donde el problema se ha vuelto mayor, los conductores citados se enfrentan a una multa de $ 300 por la primera ofensa, $ 750 para la segunda infracción y $ 1,000 para una tercera o mayor ofensa dentro de los cinco años. Solo en los meses de enero a junio de este año, los recaudos por ese rubro fueron de $ 573.425.
¿Cuándo debe detenerse?
1. Calle de dos carriles: Cuando un autobús escolar se detiene y activa sus luces intermitentes rojas o de color ámbar. Debe detenerse TODO el tráfico en ambas direcciones.
2. Calle de dos carriles con un carril central específico para girar: Cuando un autobús escolar se detiene y activa sus luces intermitentes rojas o de color ámbar. Debe detenerse TODO el tráfico en ambas direcciones.
3. Carretera de cuatro carriles sin una división en el medio: Cuando un autobús escolar se detiene y activa sus luces intermitentes rojas o de color ámbar. Debe detenerse TODO el tráfico en ambas direcciones.
4 Y 5: Carretera de cuatro carriles o más con un carril central específico para girar: Cuando un autobús escolar se detiene y activa sus luces intermitentes rojas o de color ámbar. Debe detenerse TODO el tráfico en ambas direcciones.
6. Autopista dividida de cuatro carriles o más con un muro central que separa el tráfico: Cuando un autobús escolar se detiene y activa sus luces intermitentes rojas o de color ámbar, solamente debe parar el tráfico que va en la dirección del autobús. (Recurso gráfico Gwinnett County Public Schools)