Víctimas de crímenes tienen una esperanza legal que muchos no saben (II)
Por: Rafael Navarro –ENG
Cuando “Antonio” fue agredido hace un poco más de año y medio a penas se estaba recuperando de una operación inguinal, de la que le contaba detalles a su madre en México cuando tres hombres de origen afroamericano se le acercaron y para robarle el celular procedieron a agredirlo.
“Yo recuerdo que ya estaba un poco oscuro pero pude distinguir que eran tres y como los vi de frente pude también ver sus caras, contó en una ocasión el hombre de origen mexicano a El Nuevo Georgia.
Luego de los golpes recibidos y una pequeña herida en su costado producto de la violencia que usaron sus agresores, la victima llamó a la policía, llamada que atendió una patrulla del condado de Gwinnett debido a que los apartamentos donde residía están ubicados en Norcross cerca de la Indian Trail.
“Hicieron el reporte, me preguntaron mis datos y todo quedó hasta ahí”, recuerda.
Sin embargo a los pocos días el hombre fue llamado por las autoridades porque un grupo de sospechosos de varios asaltos en la misma área había sido detenido y requerían de su identificación para levantarle cargos.
“Los pude reconocer, eran ellos, los que me habían golpeado, al parecer habían robado también a otras personas”, argumentó la víctima.
A raíz de su testimonio la banda fue desmantelada y la vida del hombre volvió a su normalidad.
Un arresto, una nueva esperanza
Transcurrido menos de un año de los incidentes, Antonio fue abordado por una patrulla de Gwinnett por una ligera infracción de tráfico lo que lo condujo a la cárcel, temida por la aplicación del programa 287 (g), que permite que a los detenidos se les indague su estatus migratorio y si es el caso, ponerlos en proceso de deportación.
Sin embargo de ahí pudo salir luego de pagar una fianza, para luego tener que enfrentarse al juez que finalmente decidiría su destino.
En ese proceso, el mexicano dice que una de las secretarias de la Corte le dijo que si él alguna vez no había sido víctima de algún crimen, algo así como un asalto o un ataque que hubiera sido denunciado a las autoridades.
“Me acordé del asalto, de lo que había pasado después con los ‘morenitos’ y comenzaron a pedirme documentos.
Un proceso lento pero seguro.
Lo que inició este hombre a partir de ese momento fue a recopilar información sobre todo lo relacionado con el ataque.
“Pedí copia a la policía del reporte, lo mismo que de las pruebas de lo que había pasado después cuando reconocí a los asaltantes y con eso iniciamos el camino a pedir la Visa U”, recuerda.
Un conocido le recomendó al abogado Hipólito Goico, quien decidió escuchar su caso y revisar sus documentos, después de lo cual decidió ayudarlo sin ningún costo.
“Tuvimos que esperar un poco, a veces parecía como si no fuera a salir nada, a veces me pedían más pruebas o más documentos pero un día me llamaron y me dijeron que podía ir a hacerme las huellas”.
Muchos no saben aun de la Visa U.
Para el abogado de Inmigración Luis Virguez, parte del problema de muchas personas es que no tienen conocimiento de este tipo de visas.
“Sabemos de muchos casos en los que las personas han podido aplicar para una Visa U y no lo han hecho, simplemente porque no lo saben o no han sido bien asesorados”, afirma.
En su oficina ha podido ayudar a clientes que llegaron involucrados en un caso criminal y terminaron siendo peticionarios de Visa U, porque su caso lo ameritaba.
“Estamos seguros que hay muchas más personas que tienen derecho a una petición de este tipo pero no la saben hacer o no saben que pueden hacerla” destaca el jurista.
Rocío Woody, directora ejecutiva de Road to Recovery, una clínica de consejería y asistencia en casos de tratamientos sicológicos y terapéuticos, concuerda con Virguez en que se requiere de más información hacia el público.
Nuestro trabajo es evaluar el impacto sicológico a causa del asalto o la agresión”, dice Woody.
“Ese proceso indica como quedo el individuo, si ha estado en tratamiento o bajo medicamentos y si el daño no solo fue causado a él sino también a su familia”
Otro aspecto a distar es que la víctima no necesariamente ha tenido que recibir algún tipo de agresión física o heridas, golpes o contusiones para poder ser candidato para aplicar a una visa U.
“Por el hecho de una persona no haya sufrido un daño físico, no quiere decir que o tenga forma de demostrarlo”, advierte Woody.
“Generalmente cuando una persona ha sido asaltada y en ese asalto ha sido amenazada con un arma sobre su cabeza o ha sido amordazada, o han amenazado a su familia, estos individuos pueden tener secuelas en el futuro y todo ello llega a evidenciarse por medio de un tratamiento o terapia sicológica”, dice la experta.
Woody también advierte que la certificación médica y sicológica es una herramienta tan valiosa en el proceso de aplicación de una visa U, como lo es informe policial o la certificación de la Corte.
La Visa “U”
La visa U para no inmigrantes, se creó pensando en las víctimas de crímenes que han sufrido abuso mental o físico y que están dispuestas a colaborar con las agencias policiales y funcionarios del gobierno a fin de investigar y juzgar al abusador.
Su propósito es lograr que los inmigrantes ilegales en Estados Unidos denuncien crímenes violentos, puesto que muchos de los crímenes contra extranjeros ilegales en los Estados Unidos no son denunciados ni esclarecidos debido a la amenaza de deportación si la víctima declara.
¿Cuáles son los requisitos para clasificación en una Visa U?
1. La persona debe haber sufrido abuso físico o mental producto de una actividad criminal calificada.
2. La víctima es capaz de suministrar información referente a dicha actividad criminal.
3. La persona debe colaborar durante la etapa de investigación o procesamiento del crimen.
4. El crimen debe violar las leyes de los Estados Unidos o haber ocurrido dentro de los Estados Unidos.
¿Qué tipo de crímenes debe haber sufrido la víctima?
Estos son algunos ejemplos de las infracciones estatales o locales a las leyes de los Estados Unidos:
Asesinato, violación, tortura, violencia doméstica, estupro, explotación sexual, prostitución, incesto, tortura, tráfico de personas, secuestro, rapto, servidumbre involuntaria, chantaje, extorsión, asaltos a mano armada entre otros delitos a los cuales están vulnerables la comunidad de inmigrantes ilegales.
Pasos para la solicitud de una Visa U
Los extranjeros víctimas de crímenes deben presentar una solicitud para Estado U, por medio del formulario I-918, donde se determina si el solicitante reúne los requisitos de aplicación y los requisitos para ser admitido en los Estados Unidos.
La víctima debe presentar una Certificación para Estado U No Inmigrante por parte de un oficial federal, estatal o local del orden público que demuestre que el solicitante “ha ayudado, está ayudando, o tiene la posibilidad de ayudar” en la investigación o proceso de la actividad criminal.
La certificación debe ir firmada por el director de la agencia o por un supervisor asignado con la autoridad para expedir certificaciones en nombre de tal agencia.
¿Se puede trabajar con una visa U?
Si bien la visa U es una visa para no inmigrantes, los solicitantes que sean inmigrantes ilegales y a quienes se haya otorgado el status de “diferidos” pueden pedir una Autorización de Empleo. Si este permiso es aprobado, será revisado anualmente.
Al igual que todas las solicitudes presentadas ante los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos, los formularios presentados para la visa U deben acompañarse con la documentación pertinente; deben adjuntarse pruebas, por ejemplo, una carta certificada por la policía local, estatal o federal, junto con fotografías, historia clínica, testimonios personales o cualquier otra evidencia relevante.
Quiere usted hablar con un abogado a cerca de la Visa U, llame a algunos de estos abogados para más detalles: Luis Virguez: (404) 315-7222; Luis Alemani: (770) 993-9636; Glenn Cooper: (770) 441-5558; George Handelsman: (404) 522-0077