Arrestan a violador y asesino de joven hispana que estaba desaparecida
La policía del condado de Clayton arrestó el pasado jueves 4 de noviembre a Gerardo Hernández, acusado de ser el violador y asesino de la joven Mónica Ambriz, desaparecida el pasado 16 de octubre y cuyo cuerpo fue hallado 10 días después en un edificio deshabitado.
Sobre el hombre la policía el hombre dijo que había sido quien había tratado de despistar tanto a la familia como a las autoridades enviando mensajes de texto desde el celular de la joven e incluso logró decirle a la hermana de la occisa que él la tenía y no la iban a volver a ver más.
Crónica completa
Valente Ambriz temía lo peor desde que tuvo noticias por parte de los oficiales de policía encargados del caso, de que el cuerpo hallado en una propiedad abandonada fuera el de su hija Mónica de 17 años, estudiante de 11 grado de la escuela superior de Morrow.
“Ha sido muy desesperante, y muy doloroso sobre todo para mi esposa pero estoy resignado a todo”, dijo el padre a El Nuevo Georgia, unas horas antes de que las autoridades le dejaran saber, que en efecto, las pruebas de ADN realizadas eran cien por ciento seguras de que el cadáver hallado era el de su hija.
Desaparición y muerte de la menor
De acuerdo a testigos y compañeros de trabajo de Mónica, el pasado 16 de octubre, ésta salió a su hora de almuerzo como siempre lo hacía y unas tres horas más tarde, hombre desconocido fue visto conduciendo por la Tara Boulevard el carro de la joven, según informó la policía en un comunicado oficial.
Según los investigadores, el carro fue encontrado al poco tiempo abandonado, pero dentro del mismo aún estaba el celular de la joven, lo que encendió las alarmas tanto de sus familiares como de la policía, pues daba señal de que ésta quizá había sido raptada en contra de su voluntad.
En el día de la desaparición, la policía dijo que un mensaje de texto fue enviado desde el teléfono celular de Ambriz, a su hermana, que posiblemente no fue escrito por ésta debido a algunas imprecisiones gramaticales y forma de escribir de la joven, aunque no revelaron el contenido del mismo.
“Alguien ha tratado de jugar sucio”, dijo uno de los oficiales encargados de la investigación.
Según reportó el diario local Clayton News Daily: “Dos testigos dijeron haber visto a la víctima en el restaurante La Jungla de la Metropolitan Parkway en Atlanta más tarde esa noche [octubre 16]” y luego se conoció que frecuentaba el club Noa Noa en el condado de Gwinnett.
La búsqueda
A través de los medios de comunicación y utilizando sitios de internet que ayudan a encontrar niños desaparecidos, la noticia se fue esparciendo y cobrando interés, lo que generó diversas versiones en torno al paradero de la joven, y que en estos momentos son parte de las investigaciones que sigue la policía.
El pasado 26 de octubre, el cuerpo de una mujer fue encontrado en un edificio abandonado, a una milla de El Progreso, la tienda donde laboraba la joven y de donde salió para no regresar.
Sin embargo, los investigadores no quisieron aventurarse a confirmar que se trataba de Mónica, debido al estado de descomposición del cuerpo, según supo de manera extraoficial El Nuevo Georgia, lo que generó el desespero dentro de su seno familiar.
“Nos dijeron que todo coincidía con ella, pero que no podían confirmarnos nada, pasaron 8 días y no nos han vuelto a decir nada”, dijo Valente Ambriz, padre de la menor.
En efecto, el martes 2 de noviembre en las horas de la mañana, la familia Ambriz recibió la visita nuevamente de los detectives que ya habían estado en su casa días antes acompañando al equipo forense que les hizo las pruebas de sangre para comparar el ADN, con el cadáver hallado, y para esa hora el desespero se había apoderado de todos.
En las horas de la tarde, el padre de la menor dijo sentirse muy enojado porque los detectives no le habían querido informar más acerca del paradero del cuerpo de su hijo, mientras los medios de comunicación habían empezado a llamarlo para reconfirmar la identidad del cadáver de Mónica.
Según la policía, el administrador de unos locales comerciales que habían permanecido solos, quien mostraba la propiedad a unos posibles arrendatarios, encontró el cuerpo en el interior de los mismos dando aviso de inmediato del hecho.
No dan detalles
Con los ojos enrojecidos, María de los Ángeles, madre de una de las amigas de Mónica y allegada a la casa de una tía de la menor muerta, contó que la noticia d ela desaparición y posterior hallazgo del cuerpo de la estudiante les había afectado mucho, por la forma cómo había ocurrido a pleno luz del día.
“Eso es muy preocupante, nadie dice que vio nada, nadie sabe nada y ni siquiera las cámaras de seguridad o algo…es muy triste que esto pase”, dijo la mujer aturdida por los acontecimientos.
Extraoficialmente la mujer dijo al parecer la joven victima habría sido violada y posteriormente asesinada, aunque de manera oficial la policía negó decir cómo Ambriz fue asesinado, o en qué estado había sido hallado su cuerpo.
Un detalle que la policía no sabe
En su diálogo con El Nuevo Georgia, el pasado 2 de noviembre Valente Ambriz recordó que había un detalle que él y su esposa habían pasado por alto, con relación a su hija, y es que hace alrededor de 2 o 3 meses, ésta llamó a su madre para pedir que la recogieran en la tienda, porque tenía miedo de salir.
“Ella trabajaba en la tienda de lunes a jueves de 5 de la tarde a 10:45 de la noche y sábados y domingos desde las 2 de la tarde, pero una noche ella llamó a su mamá y le dijo que un muchacho la llamó y le dijo que la esperaba a la salida”, recordó el hombre.
Sobre este incidente, detalló que esa noche él y su esposa pasaron por la tienda, vieron todo normal y la recogieron, pero no investigaron con Mónica detalles acerca de quién era el hombre de la llamada y por qué ella le tenía miedo.
“Ahora lo recuerdo, y quizá eso lo hicieron para que a ella le diera miedo por ese día y después le diera confianza y todos nos olvidáramos de lo que pasó…pero eso si lo recuerdo con claridad, un hombre al que ella le tenía miedo”, recalcó el padre.