No hay trabajadores suficientes en Georgia
Por: Rafael Navarro- ENG
Mientras elabora las tortillas en el restaurante donde trabaja desde hace 7 años, Alie recuerda como antes de la pandemia 5 empleados laboraban 6 días a la semana, ahora son solo 3 y los días se han reducido a 4 ¿Por qué le preguntamos?
“No hay ventas está muy despacio”, respondió sin vacilar “No viene mucha gente como antes”, dijo la mujer sin dejar de laborar en su oficio, ya era casi el medio día y los comensales deberían empezar a llegar.
Alie dice que hace un promedio de mil 200 tortillas al día, y que antes, por ahí pasaba la cuenta, el propietario no estaba ese día en el negocio, pero ella, sigue creyendo que pronto todo volverá a la normalidad.
Sin embargo, esta es apenas una las tantas aristas de la situación económica actual en la que, para algunos como en el caso del empleador de Alie, la pandemia fue casi una tragedia y para otros, una bendición.
“Digamos que la pandemia nos trató muy bien”, dijo Gilka Jelambi, una de las fundadoras de Mi Tarjetería, un emprendimiento que se reinventó en el transcurso de la pandemia.
“Luego de tener un espacio físico, la pandemia hizo que cerráramos ese espacio físico, pensábamos que iba a ser lo peor, pero fue todo lo contario” dijo Jelambi.
La otra cara de la moneda
Pero independientemente de cómo cada uno cuenta su experiencia, lo que este tiempo ha demostrado, es la capacidad de muchos para mantenerse, surgir a pesar de las adversidades o reinventarse.
“La fuerza laboral que traemos al mercado, la innovación y el espíritu de reinventarnos en cualquier momento no nos deja vencer”, dijo Verónica Maldonado, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Hispana de Georgia.
Sin embargo, ahora cuando la mayoría ya sabemos que el COVID-19 habitará por largo tiempo entre nosotros, que la economía no planea volver a cerrar y que la nueva normalidad se impone, surge un fenómeno que desconcierta a muchos: no hay suficiente mano de obra en las empresas.
“Estamos encontrando una necesidad enorme que tienen los empleadores de encontrar gente, la gente está reacia a trabajar…las empresas están desesperadas buscando trabajadores”, dijo Mónica Cucalón, Gerente de emprendimiento de económico de la Asociación Latinoamericana.
Uno de los sectores afectados por la falta de trabajadores es el de la industria hotelera y de restaurantes, donde la comunidad latina juega un papel fundamental en su reactivación.
“Lo que creo yo, es que, se buscaron otras formas de vida, después de estar en el restaurante o de mesero o algo… porque no había trabajo, y esa forma de vida, quizá es más sencilla que lo que se tenía que hacer antes”, advierte Juan Bonilla, empresario de la industria de restaurantes y bares.
Aunque Bonilla admite que el éxodo de los trabajadores a otros frentes de trabajo sea la causa de la escasez de mano de obra, para otros, pudiera haber distintos motivos de peso.
“Hay varias situaciones, una de ellas, los beneficios de desempleo que se entregaron hicieron que la gente se sintiera un poco cómoda con los ingresos que estaban recibiendo”, dice Cucalón.
Pero señala a su vez, que al estar la familia en la casa cuidando a los niños, mujeres y hombres no podían trabajar y muchas mujeres debieron dejar de hacerlo.
“Otro aspecto fue el temor al COVID, definitivamente la gente tenia el temor de que se fueran a contagiar”, puntualiza.
Sin embargo, Cucalón dice que este es el mejor momento para buscar un nuevo empleo, porque la oferta hace que se negocien mejores condiciones laborales, en aspectos como el salario, las horas laborales y los beneficios, y eso termina estando a favor de los trabajadores.
Buscando trabajo
Bryan Montero dice que apenas terminaba sus estudios universitarios cuando empezó la pandemia y eso lo dejó fuera del mercado laboral por más de un año, ahora ha salido a buscar empleo y ha encontrado una variada oferta que le hace pensar que no durará mucho sin aceptar la mejor, porque ha calificado para varias empresas.
“Estoy buscando trabajo en lo mío, en alguna oficina, ejerciendo lo que estudié”, señala.
Recientemente el gobernador Brian Kemp, celebró la caída de la tasa de desempleo al 3.7 por ciento en julio, por decimoquinto mes consecutivo, por debajo del 4.0 por ciento en junio.
Mientras el promedio de la tasa de desempleo nacional es del 5,4 por ciento.
“En los sectores industriales de comercio, transporte, servicios públicos y servicios empresariales, Georgia ahora tiene más puestos de trabajo que antes de la pandemia, y los restaurantes y hoteles también han añadido más de 15.000 puestos de trabajo desde junio”, dijo el gobernador.
Iván Montufar, quien trabaja para una empresa de bodegaje y transporte de mercancía, dijo a El Nuevo Georgia que su empleador había subido los sueldos y ampliado los beneficios de retiro, ahorros, salud, vacaciones entre otros, a los nuevos contratados porque necesitaba con urgencia llenar las vacantes que tenían.
“Todo el personal de tiempo completo, ahora le estamos pagando a 19 dólares la hora y los de tiempo parcial a 17 dólares”, dijo Montufar.
Esto, sin embargo, no parece ser suficiente, ya que a diario las ofertas laborales siguen creciendo, las oportunidades en distintas empresas y oficios siguen dándose y al parecer el número de personas interesadas no llenan las expectativas.
Solo habrá que esperar que, el tiempo apareje las cargas, mientras empresarios y trabajadores llegan a un nivel de equilibrio en el que, no falte quien produzca los bienes y servicios que consumimos, mientras la economía se recupera y fortalece.