Antes de suicidarse lanzándosele a un camión, hombre hispano que acababa de asesinar a su esposa, le pidió perdón a su hijo

En la medida como transcurren los días, se van conociendo detalles relacionados con el asesinato suicidio de una pareja de 32 años de origen mexicano residente en la ciudad de Roswell.

El Departamento de Policía de Roswell dijo en un comunicado que el pasado domingo 2 de octubre, poco después de las 10:00 p. m., el 911 recibió una llamada sobre una persona herida en Midwood Roswell Apartments en Mimosa Blvd.

Los oficiales que respondieron inicialmente llegaron y encontraron a la víctima, Rosa Evaristo Pérez, de 31 años, fallecida dentro de un apartamento con una aparente herida de arma blanca.

Los familiares habían llegado a la casa para verificar el bienestar de Evaristo Pérez después de recibir mensajes vagamente de disculpa y confesión sobre una persona que ellos conocían, ese era el esposo de Rosa, Arturo Martínez.

Con esos datos, los investigadores pudieron identificar rápidamente al sospechoso principal e inmediatamente se dispusieron a localizarlo. Simultáneamente con su investigación en la escena, los investigadores de Roswell fueron notificados por el Departamento de Policía de Sandy Springs sobre un accidente de tránsito peatonal fatal que involucraba a una persona que se creía que era el mismo sospechoso.

La investigación preliminar ha demostrado que esta persona salió de un vehículo estacionado en la I-285 en dirección oeste e intencionalmente se interpuso en el camino de un camión que se aproximaba muriendo en el acto.

Pide perdón a su hijo

“Perdóname hijo yo sé que me vas a odiar por lo que hice ve a la casa se van a quedar solos”, fue el mensaje que Arturo Martínez, quien acababa de asesinar a su esposa y madre de sus dos hijos de 15 y 7 años, le mandara al mayor de estos, cuando se dirigía a la interestatal 285 a ponerle también fin a su vida.

“Estábamos juntos, pero luego yo me fui a jugar a Dave & Buster’s y estando allí recibí la llamada de mi papá”, narró Melvin Pérez, sobre la noche de los acontecimientos, dijo también que su hermana menor estaba en la casa de una tía.

Hasta el momento los cuerpos de los dos esposos y padres no han sido entregado a sus familiares, quienes adelantan una recolección de fondos para sus honras fúnebres.

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