Armonía y coherencia. Claves para proyectar una imagen personal profesional

Por: María Emilia Salazar
Tener una imagen personal profesional planificada es elegir un look apto para ir a su trabajo, visitar clientes o representar a su empresa en un evento o usar correctamente su uniforme. Y esto se puede normar para que la imagen personal profesional de la gente que allí labora sea coherente con la imagen corporativa proyectada.

Un look pulido se refleja en el cuidado de su piel, dentadura, olor corporal, depilación correcta del vello facial, el corte y peinado de su cabello, su postura erguida y elegante, uso de estilos, cortes, largos y colores de la ropa que le favorece, según su tipología: delgada o robusta, conseguir la armonía sin importar tu tipología genera confianza.

Este principio de nuestra filosofía: Ayuda a desarrollar el coeficiente de atracción. Te recomiendo comenzar de adentro hacia afuera. Aceptando tu tipología, sea cual sea. Me refiero a tu rostro, estatura, color de piel, contextura. Es más fácil transformar desde la aceptación que desde la desaprobación.

Después debes conocerte bien, poniéndole el adjetivo técnico a los rasgos de tu tipología y conociendo la solución para mejorarlo, corregirlo o aprender a convivir con ello.

Hay aspectos de nuestra tipología que no podemos cambiar. Otros tienen soluciones, eso puedes conocerlo asesorándote con especialistas en cada área, tomando en cuenta tu personalidad, estilo de vida, qué haces o quieres hacer, a quién representas profesionalmente…

Y si usted como jefe o empleador, está pensando, ¿Es posible implementar un código de vestir en el trabajo? yo le respondo que no solo es posible, sino necesario, porque la vestimenta de su personal y uso del uniforme también forma parte de la imagen corporativa.

Tips para nuestras amigas lectoras:
El arreglo personal en las damas es muy importante, las invitamos a cuidar la selección y aplicación de tintes u otros tratamientos. La higiene corporal debe ser agradable y en el caso de los cabellos evitar esa apariencia “grasa”. Si ese día no pudo lavar o peinar el cabello, lo mejor es hacerse un recogido o semi recogido con una cola o gancho bonito y discreto: en metal u otro del color de tu cabello.

Sus accesorios merecen escogerse con cuidado siempre buscando la elegancia en cuanto al maquillaje recomendamos evitar que sean exagerados o con brillo. Si no acostumbran a maquillarse mucho, como mínimo debe contar con la aplicación de un polvo facial, rímel y brillo color en los labios, para no lucir “cara lavada” que transmite un aspecto como si se acaba de levantar de la cama, poco favorable para la proyección de su imagen personal profesional.

El maquillaje que se recomienda universalmente es el “neutro”, es decir sobre tonos color tierra (beige, marrones en todos sus tonos). Darle profundidad a la mirada haciendo un triángulo en los ángulos superiores externos en tonos grises o marrones fuertes causa un buen efecto. Puede jugar con el color del labial o brillo labial en coral, bronce, rosa, evitando el rojo u otro color fuerte.

Lo que si le resta imagen profesional en su trabajo es ir con un look agresivo o sexy, que incluye ropa transparente, escotes pronunciados, pantalones muy ajustados, exceso de maquillaje, accesorios de gran tamaño o; el contrapuesto, muy descuidado, de franelas descoloridas, jeans, con el cabello destilando agua. Estos son look sociales, para otras ocasiones, no para ir a trabajar.

A la hora de elegir el vestuario –que oportunamente le dedicaremos otra columna- escoja un look casual elegante (pantalón de vestir, camisa, sweater con o sin chaqueta con zapatos de tacón) o ejecutivo formal (talleres de falda o pantalón de la misma tela combinado con zapatos de vestir clásicos.

Los vestidos estilo camiseros o en falda corte A, a la altura de la rodilla o cuatro centímetros por arriba lucen muy bien. Si en tu organización aceptan el estilo casual, los jeans con camisas cuello duro o blusones con sandalias o zapatos de tacón medio o alto. Si lleva uniforme (sport, casual, casual elegante, ejecutivo formal) úselo correctamente y aprecie los beneficios que le brinda simplificar día a día tu arreglo.

Si te mueves en el mundo corporativo o de los negocios, o quieres hacer carrera en él, debes invertir en esas prendas que proyectan esa imagen pulida. Toda persona sin importar su tipología, procedencia y grado de instrucción puede proyectar una imagen personal profesional y desarrollar su inteligencia social.

“La elegancia es una actitud y la imagen profesional es una responsabilidad personal.

Comentarios, sugerencias e Información:
María E. Salazar: 770-695-1325/678-431-9901
mariae164@gmail.com / salazar95.evc@gmail.com