Atlanta sigue siendo una de las regionales con mayores deportaciones

El Nuevo Georgia News

      A pesar de que no es un estado fronterizo donde el número de detenciones y deportaciones puede sufrir variaciones considerables, el caso de la regional de la Oficina de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos, sigue siendo interesante porque genera todos los días nuevos casos en esta materia.

Así se desprende del último informe trimestral del gobierno federal en el que se da cuenta de más de 63 mil procesos completados por distintas agencias de aplicación de la ley, muchos de los cuales terminaron en deportaciones efectivas, entre enero y marzo de 2019.

Desde Atlanta, cuya oficina cubre algunas otras ciudades del sur, se advierte que fueron detenidas mediante algún proceso migratorio unas 3,323 personas durante los 3 meses del informe, siendo el mes de febrero el de mayor movimiento.

Así las cosas, en enero fueron arrestadas en la regional de Atlanta, 1,228 personas, en febrero 1,328 y en marzo 1,167.

De todas las detenciones llevadas a cabo y reportadas, fueron deportadas en enero desde Atlanta 1,232 personas, en febrero 961 y en marzo 1,158 para un total de 3,351, en otras palabras, el 90% de todos los detenidos fueron removidos del país.

El plan sigue

            Con los planes de la administración del presidente Trump de llevar a cabo deportaciones masivas después del festivo del 4 de julio, las organizaciones en defensa de los derechos civiles, las familias y en general los que tienen que ver con el fenómeno migratorio, están tomando sus previsiones.

            Pero las autoridades dicen estar firmes. “Las estadísticas de enero a marzo de 2019 ilustran que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU., está comprometido a arrestar y expulsar a extranjeros presentes ilegalmente, con antecedentes penales, que amenazan la seguridad pública y ponen en peligro las comunidades”, dijo Nathalie R. Asher, directora ejecutiva de ICE.

“Durante este período, más del 85 por ciento de los extranjeros arrestados por los oficiales de Operaciones de Ejecución y Remoción de ICE, y más del 91 por ciento de los extranjeros expulsados ​​del interior de los Estados Unidos, habían recibido condenas o cargos penales pendientes”, agregó.

Dijo que la situación en la frontera continúa afectando la aplicación de la ley en el interior del país, con el personal de ERO rutinariamente destacado para apoyar el procesamiento y la detención de los extranjeros que llegan a pie.

“Los arrestos administrativos de extranjeros criminales durante los dos primeros trimestres del Año Fiscal 2019 bajaron un 14 por ciento en comparación con el mismo período de tiempo en 2018.

Mientras tanto las repatriaciones que hace ICE derivadas de las detenciones en Aduanas y Protección Fronteriza han aumentado un 10 por ciento en los primeros dos trimestres del Año Fiscal 2019 en comparación con el año fiscal 2011.

“La agencia está dedicada a usar sus autoridades para hacer cumplir las leyes de inmigración de los EE. UU., y los oficiales de ICE continuarán ejecutando el cumplimiento de las mismas de manera humana, respetuosa y con profesionalismo”, dijo Asher.