Secretario de estado de Georgia dice que lo han amenazado de muerte

“Es mejor que no estropees este recuento. Tu vida depende de ello”, se lee en una de las amenazas de muerte que durante el fin de semana dice el secretario de estado de Georgia Brad Raffensperger que ha recibido, por el descontento de los republicanos y especialmente del presidente Trump por los resultados que no les favorecieron en las pasadas elecciones en esta parte del país, reportó el diario NYT.

En una entrevista este lunes a medios nacionales, Raffensperger, dijo que se ha visto sometido a una presión cada vez mayor en los últimos días por parte de sus compañeros republicanos, incluido el senador Lindsey O. Graham (SC), quien cuestionó la validez de las papeletas de voto en ausencia emitidas legalmente, en un esfuerzo por revertir la estrechez de los resultados hacia el presidente Trump.

Raffensperger expresó su exasperación por una serie de acusaciones infundadas provenientes de Trump y sus aliados sobre la integridad de los resultados de Georgia, incluidas las afirmaciones de que Dominion Voting Systems, el fabricante de máquinas de votación de Georgia con sede en Colorado es una empresa “de izquierda” con vínculos con Venezuela que diseñó miles de votos para Trump no ganara las elecciones.

“El ambiente se ha vuelto tan polémico, que tanto yo como mi esposa, Tricia, hemos recibido amenazas de muerte en los últimos días.

LE HAN PEDIDO HASTA TORCER LOS RESULTADOS A FAVOR DE TRUMP

Raffensperger dijo que estaba sorprendido de que el senador Graham pareciera sugerir que encontrara una manera de poner votos legalmente emitidos. Sin la intervención de la corte, Raffensperger no tiene el poder de hacer lo que sugirió Graham, ya que los condados administran las elecciones en Georgia.

“Seguro que parecía que quería ir por ese camino”, dijo Raffensperger, en la entrevista.

En su conversación, Graham cuestionó a Raffensperger sobre la ley estatal de coincidencia de firmas y si el sesgo político podría haber llevado a los trabajadores electorales a aceptar papeletas con firmas que no coinciden.

En una entrevista en Capitol Hill el lunes por la noche, Graham negó haber sugerido que Raffensperger inventara votos legales, calificando esa caracterización como “ridícula”.

Pero admitió que sí buscó al secretario de estado para comprender los requisitos estatales de coincidencia de firmas. Graham dijo que se comunicó con Raffensperger por su cuenta y que Trump no le pidió que lo hiciera.

UNA VERGÜENZA PARA EL PAIS

“El fraude electoral es raro en Estados Unidos, pero ahora tiene un rostro y ese rostro es el del senador Lindsey Graham. Un senador en funciones que presiona a un compañero republicano para que arroje papeletas en beneficio del presidente Trump después de que Joe Biden ganó Georgia”, dijo la presidenta de Let America Vote, Tiffany Muller.

“El senador Graham debe una explicación a el número récord de estadounidenses que votaron en las elecciones libres y justas que celebramos el 3 de noviembre de 2020. Si no se da una explicación adecuada, el senador debería evitarle al país la vergüenza de su servicio y dimitir”, dijo Muller.

SE PERJUDICAN ELLOS MISMOS

El secretario de estado también advirtió que los ataques republicanos a las máquinas de votación de Dominion podrían crear problemas para los senadores republicanos de Estados Unidos, Loeffler y David Perdue, que se enfrentan a una segunda vuelta el 5 de enero y que se administrará con las mismas máquinas de Dominion.

Raffensperger ordenó el recuento en medio de críticas cada vez más duras sobre la validez de los resultados electorales que muestran a Biden por delante en Georgia.

Tanto Loeffler como Perdue le pidieron que dimitiera, Trump criticó su supervisión del proceso electoral y toda la delegación del Congreso republicano de 2021 del estado dijo que estaba “profundamente preocupada” por el recuento.

El recuento solo ha intensificado las críticas de algunos republicanos que continuaron poniendo en duda el proceso de recuento manual que solicitaron. El principal de ellos es el representante de los Estados Unidos Doug Collins, un aliado de Trump que fue derrotado por Loeffler este mes, pero está buscando una posible candidatura para un cargo más alto en 2022, a quien Raffensperger llamó charlatán y mentiroso.