Bread House abre para la comunidad
La bendición de la sede, el día de su apertura
Por: María Isabel Pérez
Como respuesta a la creciente demanda de la comunidad latina, nace en Lilburn la fundación Bread House que ofrecerá diferentes servicios principalmente a los sectores más necesitados.
La organización sin fines de lucro es liderada por Lourdes Guerra, quien desde hace muchos años viene trabajando al servicio de la gente.
“Bread House nace para llevar ayuda a las poblaciones más vulnerables de nuestra comunidad” indica su fundadora.
La inauguración se llevó a cabo en su sede ubicada en la Plaza Las Américas donde se estarán desarrollando diferentes actividades previstas en su proyecto comunitario.
Bread House tiene componentes de educación, salud y alimentos y se basa principalmente en el voluntariado de muchos colaboradores que ofrecen su tiempo para desarrollar cursos y actividades enmarcados dentro de sus objetivos.
De esta manera se han comenzado a ofrecer cursos de inglés, pero también se está implementando todo un programa para brindar a la gente talleres de manualidades, clases de zumba, cosmetología y otros que se adicionarán más adelante.
“Estamos haciendo un llamado para que nuevos voluntarios se unan a esta causa, brindando un poco de su tiempo y compartiendo con la comunidad un poco de lo que saben”, anotó Guerra.
La nueva fundación ha contado desde el comienzo con el apoyo de personas comprometidas con el bien de la comunidad, pero así mismo de muchos empresarios que han sido fundamentales para sacar adelante el proyecto.
Una larga historia
Guerra cuenta que desde el 2006 viene trabajando en iniciativas de apoyo a la población latina y aunque no ha sido fácil, sobre todo porque requiere sacrificio, ha sido para ella un motivo de satisfacción poder ayudar a la comunidad.
Esa experiencia le ha servido para este nuevo reto de liderar y fortalecer la fundación Bread House.
“Cada uno puede ayudar con algo, aportando su granito de arena, es una ayuda de calidad”, nos recuerda Lourdes.
Su visión es la de llevar soluciones comunitarias a las poblaciones más vulnerables, alcanzar a esas personas que por no hablar inglés no pueden superarse o que no cuentan con la capacitación necesaria para salir adelante.
De acuerdo con sus metas, la fundación quiere que la comunidad cuente con una organización que sientan como propia, que le brinde a la gente la oportunidad de desarrollar herramientas básicas y útiles para integrarse con mayor facilidad a la vida en el Estado de Georgia.
Como parte del equipo de voluntarios de Bread House, hay bailarines, técnicos de impuestos, profesores de inglés, pero sobre todo de personas comprometidas que entienden la necesidad de ayudar al prójimo.
La fundación viene estableciendo alianzas estratégicas con otros grupos para fortalecer su misión, de esta manera con una iglesia mormona intercambiará talleres de inglés por español y recientemente participó con el consulado de Guatemala en una actividad para celebrar el día de los niños.
Próximamente estará colaborando también con esta misión diplomática en una jornada de vacunación contra el Covid-19 el próximo 17 de abril.
Para involucrar a la comunidad, para que conozcan la fundación y se integren ya sea ayudando o recibiendo sus servicios, Bread House ha dispuesto una página en Facebook, ha establecido contacto con los medios de comunicación, ha distribuido volantes y visitado en persona a las comunidades.
“La respuesta ha sido positiva, después de la inauguración de la fundación hemos visto como algunas personas se han acercado a nuestra sede en Plaza Las Américas y ya se han inscrito para comenzar sus clases de inglés”, indicó Guerra.
