¡En las elecciones locales participe, vote!
Ballot box painted into national flag colors – United States
Por: María Isabel Pérez
Curiosamente la gente acude a las urnas cuando hay elecciones federales, mucho más que cuando se trata de comicios locales. No obstante que las elecciones municipales son trascendentales para el desarrollo directo de las comunidades.
De la elección de los funcionarios a nivel local depende en gran medida la toma de decisiones que afectan directamente la vida de las familias, el funcionamiento de las escuelas, la ciudad, la seguridad, la administración de justicia y otros importantes ámbitos de los barrios y entes gubernamentales.
Pero se ha visto que tradicionalmente, se tiende a participar con mayor interés cuando se trata de elecciones federales, en parte porque la inversión de recursos en las campañas es mucho más grande y sofisticada. La publicidad y el cubrimiento de medios sin duda juegan un papel decisivo en buscar el voto popular.
No sucede así cuando se trata de los comicios locales, donde los presupuestos de campañas son menores, y, por ende, las campañas se traducen en la transmisión del mensaje boca a boca, o visitas a los barrios y comunidades, lo mismo que eventos más localizados.
Sin embargo, conociendo la importancia de las elecciones de estos funcionarios, se debería tener un nivel de participación más activa y dinámica. Al fin y al cabo, allí se definen puntos esenciales de la vida cotidiana de todos.
Tomemos por ejemplo las elecciones de las juntas escolares. Aquí se establecen muchas de las decisiones que afectan a los estudiantes y sus familias, al desarrollo de las políticas institucionales y la buena marcha de la comunidad educativa. Por lo tanto, es primordial que se elijan buenos miembros.
Elegir los integrantes de los concejos municipales, se convierte también en una parte importante de la participación ciudadana, ya que se escogen quienes administrarán junto con el alcalde, las localidades para el bien de sus ciudadanos. De hecho, ellos son coadministradores de los bienes locales y por ende es necesario votar por los mejores.
En cuanto a las alcaldías, que serían un poco más populares y con más visibilidad, la gente debería conocer quienes aspiran y votar por quienes mejor representen los intereses de la comunidad. Son estos funcionarios quienes manejan los presupuestos y gerencian los programas de las localidades.
No me voy a referir al plano de los partidos, los cuales, para nadie es un secreto han polarizado la conversación respecto a la participación política y ciudadana en todos los niveles.
Pero, sin duda, la nueva Ley de Integridad Electoral de Georgia, que entró en vigor, verá sus frutos el próximo 2 de noviembre. Aprobada con la mayoría republicana, esta ley, hay que recordar, nace del inconformismo de los grupos conservadores respecto a los resultados de los comicios del 2020.
Aun cuando se comprobó una y otra vez la transparencia de las elecciones y se certificaron los resultados, la mera existencia de esta recién emitida ley, demuestra que alguien no está contento con la creciente participación ciudadana.
Por ello, hoy más que nunca se debe ratificar el poder popular acudiendo a las urnas el próximo 2 de noviembre, ya que será la prueba de fuego para esta ley. Desde el plano local hay que demostrar que el sistema electoral funcionó ayer y funcionará mañana mientras la gente deposite su voto de manera consciente y sin presiones.
La clave de todo es informarse, interesarse. Saber de qué se trata esta nueva ley y actuar en consecuencia. Si se es ciudadano, votar, si no, de todas formas participar ayudando en los procesos electorales siendo voluntario o compartiendo la información para que se evidencie de nuevo la votación masiva de los últimos comicios.
