Latinos, los menos preocupados por la deserción escolar

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Dos hechos pueden catalogarse como contradictorios en el 2010, en lo que tiene que ver con la comunidad latina y la educación, el primero de ellos es que, sigue siendo la comunidad que aporta el mayor número de niños y jóvenes fuera de los sistemas escolares, y el segundo, es el impulso que a final de año tomaron los “soñadores” un movimiento estudiantil que luchó para lograr la aprobación de una ley que los favoreciera.

A comienzos de año, un informa revelaba que a pesar de la difícil situación que muchos latinos pasan en Estados Unidos, son el grupo minoritario menos preocupado por la calidad de educación que sus hijos reciben.

El estudio da cuenta de que, siete de cada diez afroamericanos y seis de cada diez anglosajones consideran que la calidad de educación que el país americano imparte es un grave problema para el Estado, mientras que solo 4 de 10 latinos lo ven así, según resultados presentados por el Instituto de Políticas Públicas de California.

En ese mismo orden de ideas, el 63% de los encuestados se mostraron “muy preocupados” que los jóvenes de bajos ingresos presenten un mayor índice de deserción en el colegio que el resto de estudiantes.

Aunque muchos son los factores que influyen en estas cifras, siendo relevante entre ellos, el grado de educación de los padres y las condiciones de las familias inmigrantes, siete de cada diez latinos también dicen mostrarse “muy preocupados” de que los estudiantes de condiciones humildes estén menos dispuestos para ir a la universidad al terminar la secundaria, nueve de cada diez afroamericanos apoyan esta premisa.

En el informe para la mitad de los hispanos, la preparación que las escuelas brindan a los estudiantes para desempeñarse en el mundo laboral es muy pobre, Sin embargo, las expectativas de las comunidades pobres son altas aunque no todos se sientan preparados para ayudar.

Otra de las barreras que sigue pesando sobre los latinos para sentirse tan alejados de las cifras generales de educación en estados Unidos, puede atribuirse a los sentimientos xenofóbicos que se han generado en los últimos años en contra de la comunidad de indocumentados y la falsa premisa de que ellos agotan todos los presupuestos estatales.

Aun así, el informe dice, por ejemplo, que la mayor preocupación de los californianos encuestados -más de siete de cada 10- con respecto a los recortes presupuestarios y su efecto en la educación es la pérdida de profesores. A tres de cada cinco les preocupa que las clases aumentaran su número de estudiantes.

A nivel de aprobación de sus gobernantes y quienes dirigen al país, seis de 10 estudiantes desaprueba el desempeño de la legislatura estatal, así también, siete de diez afroamericanos y ocho de 10 anglosajones apoyan la misma postura.

Rafael Navarro

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