Por la muerte de su esposo: Mujer hispana clama justicia

Por: Rafael Navarro- ENG

Cuando el hijo que ahora lleva en sus entrañas abra los ojos a la luz del mundo, Lorena sabrá que no tendrá la dicha de verlo en los brazos de su padre Jesús Hernández, un inmigrante mexicano de 21 años, que la noche del pasado 31 de mayo perdió la vida en hechos que aun no se esclarecen y que siguen siendo investigados por parte de las autoridades.

Menuda, con la mirada perdida y la voz entrecortada, Lorena de 20 años natural del estado de Querétaro en México, dijo a El Nuevo Georgia que el último día que su compañero salió a trabajar pudo hablar con él en dos oportunidades, y que ya pasadas las 8 de la noche no tuvo más noticias de él.

“Hablamos en la mañana, como a las 2 de la tarde y como a las 6, ya en vista de que no regresaba lo llamé como a las 8 pero no me respondió”, dice, mientras hace una pausa para recobrar fuerzas.

A la entrada de Murphy Brother’s Funeral Home en Marietta, y acompañada de su cuñado Marcelino Popoca, quien viajó desde Florida a encargarse de los funerales de su hermano menor, Lorena narra que esa noche de martes se le volvió interminable, y luego en el día intentó de nuevo comunicarse con Jesús, pero sin tener éxito.

“Dejé pasar ese día, pensé que quizás estaba detenido y ya el jueves en la mañana había decidido ir a reportarlo con la policía” afirma.

Pero no tuvo que hacerlo, la mala noticia llegó primero, uno de los detectives del condado de Cobb tocó la puerta de su casa para avisarle que uno de los dos hombres que habían muerto en hechos confusos en una casa de Austell, era Juan, y que la requerían para hacer el respectivo reconocimiento.

El mundo se le vino encina, con 7 meses de embarazo y apenas un año de estar a su lado, Lorena acababa de recibir la peor noticia de su vida.

¿En el momento y lugar equivocado?

Marcelino Popoca, quien vivió unos años junto a su hermano en Tifton, sur de Atlanta, dijo a El Nuevo Georgia que no entendía nada de lo que estaba pasando, él fue avisado de los hechos, por su cuñada y un tío y de inmediato viajó con su familia a apersonarse de los trámites del traslado de los restos de su hermano a México.

Consultado sobre los hechos, el oficial Michael Bowman de la policía de Cobb ratificó la identidad de las víctimas, pero no hizo más comentarios acerca del incidente y solo se limitó a decir que las investigaciones estaban en curso.

“La primera víctima fue identificada como Jesús Hernández Saucedo de 21 años, de residente en Mableton, y la segunda víctima como Antonio Zapata de 31 años de edad, también de Mableton”, dijo Bowman.

Bowman afirmó que esa noche del 31 de mayo aproximadamente a las 22:59 horas, (10:59 pm) atendieron una tercera llamada de emergencia al 911 que daba cuenta de un tiroteo que tuvo lugar en el 3571 Clay Road en Austell.

“Dos oficiales fueron enviados a la escena, y cuando llegaron a la residencia, se dieron cuenta de que la puerta principal estaba entre abierta. Los oficiales entraron a la casa donde descubrieron dos varones que habían sido asesinados con aparentes heridas de bala”.

Como resultado de la investigación, los detectives obtuvieron una orden de arresto contra Charles Robbie Giddeons Jr., un hombre de 26 años de Austell, quien ya había huido junto con su familia y quien debía responder por 2 cargos de homicidio preterintencional y 2 cargos de asalto agravado.

De acuerdo a versiones entregadas por fuentes que pidieron no ser reveladas a familiares de Jesús Hernández, Antonio Zapata habría ido hasta la casa del agresor a cobrarle una deuda y que la presencia de Hernández solo habría sido en calidad de acompañante, ya que no trabajaba ni había trabajado con él anteriormente.

La misma noche de los hechos la policía montó un operativo para impedir que Giddeons saliera del estado junto a su esposa y dos hijos pero el 5 de junio fue detenido sin oponer resistencia por la policía del poblado de Martínez en el condado de Columbia, al noreste de Atlanta.

La propia madre del acusado, dijo que su hijo estaba en negocios de drogas, y que un hombre al que solo conocía como Tony, le estaba buscando, pero hasta el momento no se sabe si se trata de Antonio Zapata, una de sus víctimas.

Quiero que me ayuden

“Yo no quiero que la muerte de Jesús se quede así, sin que nadie le de importancia como pasa muchas veces, yo quiero saber qué pasó y porqué lo mataron”, dice su compañera.

Marcelino Popoca, hermano de Jesús, pidió a las autoridades de su país a través de El Nuevo Georgia, que no los dejaran solos en la investigación sobre los móviles de la muerte de su hermano para que se hiciera justicia.

“Sabemos que muchas veces porque somos hispanos nadie nos presta atención y nadie paga por nuestros muertos”, dijo Popoca.

Armando Bello, agregado de prensa del consulado de México en Atlanta, confirmó que esa misión diplomática estaba al tanto de los hechos ocurridos y que la habían ofrecido asistencia a la familia con el traslado de los restos del difunto a su tierra natal.

“Así mismo les hemos sugerido una lista de abogados para que ellos decidan a quién escogen, pero siempre seguimos pendientes de lo que ocurra con este y todos los casos”, dijo Bello.

Entre tanto, a partir de este jueves 9 de junio, cuando el cuerpo de Jesús sea trasladado a México, Lorena quedará completamente sola y con un hijo en su vientre que no podrá conocer a su padre sino en las últimas fotografías que como presagio quizá de lo que le iba a ocurrir, se tomó el pasado 15 de mayo, donde aun lucía sonriente y feliz de que dentro de poco iba a volver a ser papá de nuevo.

Al cierre de esta edición de la segunda víctima y sus familiares no se habían obtenido detalles.