Sustancias legales: La otra cara de la adicción

Por: Rafael Navarro- ENG.

Para el agente “Dan” de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, DEA, la misión que lleva a cabo el día de la entrevista es tan importante como cualquiera otra que haya tenido que emprender en la lucha de su agencia por combatir el tráfico, comercialización y uso de sustancias controladas, con el mismo sigilo y las mismas precauciones el oficial aplica todos los protocolos de rigor.

El resultado final, más de 21 libras de pastas, píldoras, pastillas y capsulas de todo tipo de medicamentos recetados que serán incinerados de la misma forma en que se hace con la cocaína o la marihuana, por ejemplo, en este caso, el cargamento no es parte de un decomiso ni de una operación riesgosa contra ningún cartel, los propios dueños de las medicinas las han llevado de manera voluntaria a un puesto de recepción diseñado para ello.

“Esto lo hacemos como campaña de educación y concientización, dos veces al año, pero con los departamentos de policía locales y otras organizaciones la campaña es todo el año” dice Dan, refiriéndose a la recolección de medicamentos recetados que las personas ya no usan por múltiples factores.

“El tratamiento que le damos a estas drogas, es el mismo que se le da a cualquier otra, sabemos que muchas de éstas pueden ser muy peligrosas si no se usan de la manera adecuada” afirma el agente, quien trabaja en los cuarteles generales de la DEA en Atlanta.

Abuso de sustancias “legales”

Estudios recientes advierten que alrededor de uno de cada diez adolescentes y adultos jóvenes estadounidenses afirman haber abusado de un analgésico o sedante recetado. Los investigadores llevaron a cabo una encuesta confidencial de más de 2,100 personas de 14 a 20 años de edad que visitaron los departamentos de emergencias del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan por cualquier motivo entre 2010 y 2011.

Los resultados mostraron que el 10.4 por ciento de los participantes habían admitido abusar de un analgésico o sedante recetado al menos una vez en el año anterior. Esto incluyó tomar los fármacos para drogarse, tomar más de la cantidad recomendada de un fármaco que se les había recetado, y tomar fármacos recetados a otra persona.

“La mayor parte del abuso de los fármacos fue ilegal. La gran mayoría de los pacientes que admitieron abusar no tenían recetas para esos fármacos en sus expedientes médicos, según los autores del estudio, que aparece en la edición en línea del 28 de octubre de la revista Pediatrics.

“El abuso de los medicamentos recetados ha alcanzado niveles epidémicos en EE. UU. En muchos estados, las sobredosis de medicamentos recetados matan a más personas que los accidentes de tráfico”, según el informe.

Otra encuesta también revelada en octubre pasado, señala que el porcentaje de personas de 18 a 25 años de edad que afirmaron haber tomado ilegalmente medicamentos recetados durante el mes anterior fue del 5.3 por ciento en 2012. La tasa es similar a las de 2011 y 2010, pero mucho más baja que la tasa del 6.4 por ciento de 2009.

Más cuidado en el hogar

Nicky López, quien trabaja para uno de los proyectos especiales de prevención de la Clinica de Educación Tratamiento y Prevención de Adicciones—CEPTA, por sus siglas en inglés, dice que es preocupante la forma en que los niños y adolescentes están haciendo mal uso de sustancias que tienen a la mano en sus propias casas.

“Muchachos que no tienen acceso a dinero o se quedan solos en la casa, pueden estar usando alcohol, medicinas recetadas o algunos gases que tenemos para limpiar las computadoras o hasta el gas que tiene el aire acondicionado para enfriar”, dijo López, luego de inaugurar la segunda conferencia sobre prevención de la adicción, única en este género que se da en español en todo el estado de Georgia.

Sin embargo para López, quien hizo una presentación detallada de las nuevas modalidades que los jóvenes usan para drogarse, los más peligrosos siguen siendo los narcóticos, “porque son los más usados y causan más muertes, los narcóticos causan una depresión cerebral que causa que el cerebro se le olvide respirar…esa es una manera sencilla de explicarlo, y las personas mueren por eso”

Se refirió también a los aerosoles y a otros gases y sustancias que podrían pasar en un momento dado desapercibidas, pero cuando los chicos van al internet y encuentran formas de usarlas se tornan dañinas y peligrosas.

“Cualquier aerosol que hay en la casa tiene un gas y eso es lo que hace que el líquido esté comprimido en la botella y con eso los muchachos se están drogando” señaló López.

Como prevención, pidió a todos los padres observar el comportamiento de sus hijos, pero antes que nada tomar las debidas precauciones en el hogar y fomentar la comunicación.

“Yo pienso que lo primero es observar a nuestros hijos, que está pasando en nuestra casa, tener una buena comunicación con ellos, porque no todo se puede mantener escondido, pero con las medicinas recetadas y el alcohol eso si se debe tener bajo llave o un sitio donde ellos no tengan acceso”, recomendó.

Los latinos y las drogas

Para algunos trabajadores en el ramo de la prevención de las adicciones, las últimas cifras relacionadas con el consumo de droga de todo tipo y alcohol entre los jóvenes latinos es preocupante, pero no menos escandalosa es la percepción que los padres latinos tienen a cerca del abuso del alcohol y la marihuana en sus hijos.

“Los jóvenes latinos tienen el índice más alto que cualquier otro grupo étnico el 54% e entre quienes han probado droga alguna vez, comparado con el 45% de los afroamericanos y el 43% de los blancos”, recordó Nicky López, así mismo:

“El 62% de los adolescentes latinos ya han tomado alcohol, mayor que los afroamericanos que son un 50% y un poco más cercano a los blancos que dijeron ser un 59%”

“Ciertamente tenemos a la vez, que la deserción escolar en los latinos es mucho más alta, aunque los muchachos que se gradúan y llegan a la universidad sigue subiendo, pero hay muchas cosas en las que tenemos que mejorar como comunidad”, dijo la experta y agregó.

“Yo me sorprendo porque el 21% de los papas latinos piensan que no hay ningún problema con que sus hijos fumen marihuana de vez en cuando, los blancos el 6% y los afros el 11%, eso no tiene sentido, si decimos que somos una comunidad de familias conservadoras, pero algo nos debe estar afectando”, enfatizó.

La disposición final de las drogas recetadas

Para la detective Rivera de la policía de Norcross, una de las mejores formas de prevenir el mal uso de drogas recetadas en los hogares, así como el de otras sustancias es la prevención y la disposición final que se haga de éstas, cuando en el hogar ya no se estén usando ciertos medicamentos o productos aparentemente inofensivos.

En eso concuerda con el agente Dan de la DEA y con Nicky López de CETPA, “Lo que está sucediendo es que hemos visto que las drogas que las personas tienen en sus casas están siendo mal usadas, no solamente, por quien le pertenece la medicina sino por otras personas que están en las casas”, dijo Rivera.

“Lo que quiere la DEA”, aseguró Rivera, “es que las personas no tiren los medicamentos al lavamanos o a la basura para evitar daños al medio ambiente pero también para que los jóvenes no tengan acceso a esas drogas”

En efecto, el departamento de policía de Norcross es uno de los sitios donde todo el año, las 24 horas del días, siete días a la semana, hay dispuesto un lugar especial donde las personas pueden entrar a depositar los medicamentos que ya no usen.

“El departamento de policía permaneces abierto las 24 horas” recordó la detective. “Nosotros pedimos que las traigan aquí…los padres no se dan cuenta lo que ellos tienen, ni lo que está sucediendo en sus propias casas, si ellos tienen drogas en sus casas nosotros recomendamos que las guarden donde otras personas no tengan acceso a esas drogas” recomendó Rivera.

Dijo que en su experiencia, lo que ellos han visto en el presente es que muchas personas latinas no se quieren acercar a los departamentos de policía, no confían, le tienen miedo.

“Entonces a través de esta y otras campañas queremos que ellos se acerquen a nosotros que no nos tengan miedo, porque que esas medicinas que se han vencido y se van a deshacer de ellas deben ir a los puntos de recaudo y en la oficina de Norcross hay una caja para que lo hagan y no se pregunta nada ni deben dejar ninguna información”.

Por qué no descargar medicinas en los desagües

Una costumbre común es que en las casas los medicamentos que no se están usando se descarguen en lavamanos o inodoros, algo que no es recomendable dada la potencia de algunas sustancias que no se diluyen ni descomponen fácilmente y pueden regresar a los hogares a través del agua potable.

“No debemos botar los medicamentos a las basuras o los inodoros”, advierte Nicky López, “se han
encontrado residuos de medicamentos en las aguas…en una granja de peces se encontraron residuos de pastillas para el control de natalidad porque las plantas de tratamiento de aguas negras no alcanzan a procesar algunas sustancias”, dijo y recomendó las cajas que hay en las estaciones policiales.

“Las cajas de desechos que tienen los departamentos de policía y la DEA a través de sus campañas en abril y en octubre son lugares seguros para desechar esas drogas”, concluyó López.

Incidencia de las drogas en los jóvenes

-Un informe publicado este año para conmemorar el mes nacional de la recuperación, indicó que el porcentaje de personas de 12 años y mayores que condujeron bajo la influencia del alcohol al menos una vez durante el año pasado fue del 11.2 por ciento en 2012, en comparación con el 14.2 por ciento en 2002 y el 11.1 por ciento en 2011.

-La tasa general de consumo ilícito de drogas en los estadounidenses de 12 años y mayores fue parecida en 2011 y en 2012, de aproximadamente un 9 por ciento (o casi 24 millones de personas), según los hallazgos.

-En cuanto a las drogas ilícitas, la marihuana sigue siendo la más usada: un 7.3 por ciento de los estadounidenses consumieron marihuana en 2012. El consumo de marihuana aumentó en casi cada grupo de edad entre 2007 y 2012, pero se redujo del 7.9 por ciento en 2011 al 7.2 por ciento en 2012 en las personas de 12 a 17 años.

-También se produjo un aumento significativo en el consumo de heroína. La cantidad de personas de 12 años y mayores que consumieron heroína durante el año pasado aumentó de 373,000 en 2007 hasta 669,000 en 2012, hallaron los investigadores.

-Buenas noticias: El consumo del tabaco entre las personas menores de 18 años se redujo desde el 15.2 por ciento en 2002 al 8.6 por ciento en 2012, y el porcentaje de personas del grupo de 12 a 17 años de edad con dependencia o abuso de sustancias disminuyó desde casi el 9 por ciento a aproximadamente un 6 por ciento durante el mismo periodo.

-No obstante, el informe también halló que muchos estadounidenses que necesitan tratamiento debido a un trastorno por el consumo de sustancias todavía no reciben un tratamiento especializado. Los resultados mostraron que aunque un estimado de 23 millones de estadounidenses de 12 años de edad o mayores necesitaron un tratamiento por abuso de drogas ilícitas o de alcohol en 2012, solo 2.5 millones (aproximadamente un 11 por ciento) de esas personas siguieron un tratamiento en un lugar especializado.

“Estas estadísticas representan personas reales, familias y comunidades que se enfrentan a las consecuencias devastadoras del abuso y la adicción. Debemos luchar para evitar que haya más casos de abuso y proporcionar la esperanza del tratamiento y la recuperación a todas las personas que necesiten ayuda”

Gil Kerlikowske, director de Políticas Nacionales de Control de Drogas, hizo hincapié en que “para reducir el impacto del consumo de drogas y sus consecuencias en nuestro país se requiere una respuesta en la salud pública contundente junto con estrategias hechas a medida que protejan la seguridad pública”.

“Por primera vez en una década, estamos viendo reducciones reales y significativas en el abuso de medicamentos recetados en Estados Unidos, lo que demuestra que una respuesta más integral a nuestro problema con las drogas puede tener un impacto real en hacer de nuestro país uno más sano y más seguro.

Ampliar la prevención, el tratamiento y el respaldo a las personas que se estén recuperando debido a algún trastorno por el consumo de sustancias nos orientará al trabajar en otras dificultades que están emergiendo, como el aumento reciente del consumo de heroína tal y como se muestra en esta encuesta”.

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