La política cambia de rumbo con la mayoría republicana en Washington
Los republicanos acumularon victorias en el Senado en siete estados, incluyendo algunos de tradición republicana —Arkansas, Montana, Dakota del Sur y Virginia Occidental— y tres estados donde Obama obtuvo grandes victorias en sus dos campañas presidenciales: Iowa, Colorado y Carolina del Norte. Los republicanos necesitaban una ganancia neta de seis escaños para conseguir la mayoría por primera vez desde 2006.
“Gracias a ti, Iowa, nos dirigimos a Washington, y vamos a hacerles chillar”, declaró la senadora republicana de Iowa Joni Ernst, que prometió cortar cerdo en Washington en un anuncio de televisión donde recordaba cómo había castrado cerdos durante su infancia en una granja, citada por la agencia de noticias Prensa Asociada.
En el Congreso, los republicanos iban camino de igualar o superar los 246 escaños que tuvieron durante la presidencia de Harry S. Truman, hace más de 60 años.
“Nos sentimos honrados por la responsabilidad que nos ha otorgado el pueblo americano, pero éste no es un momento de celebración”, afirmó el presidente de la Cámara, John Boehner, de Ohio. “Es un momento para que el gobierno empiece a obtener resultados y a introducir soluciones para los desafíos a los que se enfrenta nuestro país, empezando por nuestra aún dañada economía”.
En las capitales de estado, los republicanos consiguieron puestos de gobernador en estados habitualmente demócratas como Illinois, Maryland y Massachusetts. Con el Congreso enfangado en un punto muerto, los estados han estado en la vanguardia de los esfuerzos por aumentar el salario mínimo y aplicar la ley sanitaria de Obama.
Muchos gobernadores republicanos que se presentaban a la reelección sufrieron de bajos índices de aprobación, pero se mantuvieron en el puesto. Era el caso del gobernador de Florida, Rick Scott, que derrotó al demócrata Charlie Crist, un ex gobernador republicano; el gobernador de Kansas, Sam Brownback; y el gobernador de Wisconsin, Scott Walker, un posible aspirante a la candidatura republicana para las presidenciales de 2016.
Los votantes expresaron su amargura por la lenta recuperación económica y la gestión de las crisis en el extranjero. Casi dos tercios de los electores entrevistados dijeron que el gobierno anda por mal camino. Sólo 31% dijo que el gobierno marchaba por el camino debido.
Más de 4 de cada 10 electores entrevistados después de votar desaprueban la gestión tanto de Obama como del Congreso, según los resultados preliminares de encuestas realizadas para la AP y cadenas de televisión.