¿Qué puedes hacer durante esta cuarentena?

Por: Juliana Henao

Hace solos unos días atrás la agenda de todos estaba llena con fechas de fiestas de cumpleaños, reuniones en las escuelas de los chicos, citas médicas, viajes, fechas límites de entrega de proyectos, pagos por hacer y hoy algunas de esas actividades se han aplazado, algunas no se saben si se van a dar, y otras definitivamente se cancelaron.

Y es que esta cuarentena nos puso a todos en estado de quietud y acabo con el mito de “no tengo tiempo”, e hizo la realidad el sueño de muchos de no tener que ir al trabajo y quedarse en casa, de no ver al jefe, de no estar con los fastidiosos de los compañeros, de conducir en el tráfico o ir en el transporte público, de compartir con los seres que aman. 

Los primeros días todo lucía fantástico y maravilloso, pero cuando las noticias avisan que hay quedarse un poco más de lo esperado, la rutina diaria se vuelve la protagonista y el dinero empieza no es igual es cuando empiezan los retos en casa.  La mente empieza a hacer ruido y  aparecen los miedos y los conflictos. 

¿Qué puedes hacer durante esta cuarentena?

Tomar consciencia de la situación actual en la que te encuentras.  Es un momento de transformación, una oportunidad para conocerte, de prestar atención a lo que sientes, a lo que experimentas en tu interior, a hacer muchas de las cosas que hace rato que querías hacer. 

Hoy no tienes distracciones, hoy te puedes dedicar todo el tiempo para ti y para aquellos que amas. Con seguridad tu vida después de hoy no será igual, si tomas consciencia podrás descubrir muchas cosas que no conocías ni de ti, ni de los más allegados a ti, como si los amas, o solo los aguantas, a quien realmente extrañas y esto es solo un ejemplo para citar algunas de las situaciones y hechos dentro de la gama de posibilidades.

El tomar consciencia lo puedes hacer mediante dar las gracias diariamente, ¿qué te parece empezar por agradecer tu salud? Por tener a quien amar, más de quien te ame. 

Acallar tu mente mediante la meditación; escuchar lo que te dice todo ese ruido y dejarlo ir poco a poco, puedes imaginarte que cada pensamiento de miedo, de escasez es desintegrado por una luz blanca. 

Orar: No desde el miedo y la escasez sino desde el amor, desde la confianza que el Dios en el que crees sabe lo que es mejor para ti. Esta vez deja de pedir. Confía en que recibirás lo que necesitas.  Confía en que no vivirás en la escasez.

Crea un horario que te permita tener unas actividades planeadas dentro de casa, levantarte temprano para las meditaciones, hacer un poco de ejercicio, comunicarte con tus amigos y familiares que están en la distancia, ver una película, jugar un rato, y también para no hacer nada, de organizar tus finanzas, ver qué es necesario y qué no, de limpiar tu casa, tu armario, tu desorden. Tiempo para estar contigo.

El cielo te ha dado un gran regalo, hoy la riqueza no se mide en lo que tienes, sino en la capacidad que tienes para disfrutar cada día.